MARIO RIVA, EL PILOTO QUE NO QUISO SER AVISPA Y APUESTA POR UNA CUBA SIN ARMAS

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Por Carlos Cabrera Pérez

«Me quiero más a mí, de lo que pudiera querer al general»

 Madrid.- Mario Riva Morales (La Habana, 1950). Máster en Ciencias Militares, domina los idiomas Inglés, Ruso y Portugués, desciende de emigrantes italianos de la región de Brescia, por parte de padre; de ahí su apellido en singular, pero el mayor aporte de su familia no fue el patronímico sino que estudiara en buenos colegios privados y bilingües de Miramar. Siendo un muchachón descubrió su pasión por la aviación, especializándose en helicópteros con los que voló por los espacios aéreos de Guinea Conakry, Angola y de punta a cabo de su Cuba natal.

Su desencanto con el castrismo fue en ascenso gradual, casi como su carrera militar, donde tuvo más de una bronca por oponerse a tácticas y estrategias combativas que consideró erróneas, aunque nunca rehusó jugarse el pellejo ante escenarios de guerra complicados y los desafíos de cúmulos nimbos que debían atravesar cinco helicópteros y Riva despegó y voló de puntero; o la última emboscada, ya retirado, cuando un oficial de la Inteligencia cubana lo tentó para que formara parte de lo que luego se conoció como La Red Avispa; entonces, quizá confirmó que sus días cubanos estaban agotados.

Ya en su exilio portugués, Mario Riva Morales fue uno de los cinco fundadores del Movimiento de militares cubanos objetores de conciencia para persuadir a sus compañeros de armas que no disparen contra el pueblo cubano.

¿Qué opinas sobre la reciente decisión del gobierno cubano de armar a soldados y civiles para custodiar empresas del GAE, S:A., del estado y agroindustriales?

El GAE S. A. es un grupo de administración empresarial de las fuerzas armadas de la dictadura totalitaria imperante en Cuba. Que la dictadura de Raúl Castro (representada por un “presidente”, puesto a dedo, es una demostración fehaciente de la importancia que le dan a éste conglomerado. Armar soldados y civiles para custodiar “sus” empresas es, una más de las locuras del régimen de oprobio. ¿Van a formar unidades paramilitares? ¿Es eso lo que pretenden? Digo esto, debido a que, cada una de las llamadas “empresas”, son de carácter civil.

¿Cómo evalúas el peso del GAE, SA: en la economía cubana?

La mayor parte, de estas “empresas”, pertenecen al sector hotelero, a tiendas minoristas de ventas de productos en divisas, aunque también están inmiscuidas en las aduanas y los puertos. De manera que, tienen un peso importante en la economía del país.

Las nuevas normas represivas del tardocastrismo involucran a militares en el aplastamiento de protestas populares, ¿cómo valoras estas decisiones?

Hay algo que es importante diferenciar. No es lo mismo ser militar, que ser un órgano represivo del pretendido gobierno. Involucrar unidades militares que no sean del MININT, constituirían una afrenta más a la nación cubana, aunque a la tiranía eso le importe muy poco o nada.

¿Cuál es la situación actual de la aviación militar cubana?

La situación de la aviación militar cubana, hoy por hoy, es un desastre, si la comparamos con la aviación de la década de los años 80 del pasado siglo. Quedan algunas aeronaves volando y cada día que pasa, los pilotos (por falta de entrenamiento) tienen menor preparación.

¿Qué papel desempeña la aviación de combate en una isla?

La aviación de combate, en una isla, viene siendo algo parecido a un portaaviones, pero en el caso de Cuba, esas plataformas estacionarias en el occidente, centro y oriente del país, tal y como sucede en todo lo demás, serían portaaviones sin aeronaves. No desempeñan ningún papel actualmente.

¿Cómo debe ser la aviación militar de Cuba democrática?

Creo, muy sinceramente que, en una Cuba democrática, no deberían existir unas fuerzas armadas, ni una aviación militar. En las condiciones económicas actuales, no sería una tarea de primer orden.

En años recientes hemos asistido a accidentes aéreos, con víctimas mortales, que involucran a helicópteros de la FAR, ¿cuál es tu valoración sobre esos hechos?

La mayoría de los accidentes (con víctimas mortales) que han ocurrido en años recientes, pueden deberse al estado técnico deficiente (por carencia de piezas de repuesto). Por lo menos, en el caso del último helicóptero accidentado en Santiago de Cuba, puedo afirmar que, el presunto helicóptero H-115 fue ensamblado a finales de 1983 o principios de 1984. De ser así, esa aeronave tenía (en el momento del accidente) más de 40 años de explotación.

Todas las piezas y componentes de la aviación, tienen una vida útil, señalada por la fábrica, en horas de vuelo. Incluso aquellas que permanecen en los almacenes y no son utilizadas, se vencen por tiempo calendario y deben ser revisadas antes de ser instaladas en las aeronaves.

No me parece que el régimen (debido a lo que cuestan esas piezas y componentes) se encuentre dispuesto a gastar dinero en el mantenimiento de esas aeronaves.

¿Te parece adecuado el uso de antiguos aviones y helicópteros militares con fines turísticos?

Siempre y cuando cumplan con los protocolos exigidos por la aviación civil internacional, su utilización puede ser autorizada. Una vez más, pongo en duda que el régimen le dedique un centavo a ninguna de esa aeronaves, a no ser aquella que realizan vuelos ejecutivos con los “dirigentes” de la dictadura. El H-115, presunto helicóptero accidentado en Santiago de Cuba, realizaba apoyo “logístico” a un vuelo ejecutivo de Raúl Castro y Díaz Canel.

Se debe tener presente que, cualquier accidente de vuelo transportando turistas, es responsabilidad de las autoridades de la aviación civil. Y como tal debe ser investigado.

Antiguos pilotos, técnicos y tripulantes de Aerocaribbean aun lamentan su desmantelamiento. ¿Qué sabes de aquella desventura?

Tuve la desgracia de ver las cuevas donde se iban a ubicar los helicópteros para su preservación. En ese momento era inspector de la sección de aviación de la DAAFAR para los helicópteros y mi opinión tenía que coincidir con la del mando superior. Como no estuve de acuerdo, con aquella decisión, pedí el retiro, en 1992 y pude separarme de aquel despropósito.

Mi opinión coincidía con la de la mayoría de los pilotos. Y ponían un ejemplo: Un automóvil parado, durante mucho tiempo, al intentar volver a ponerlo, en circulación, va a presentar infinidad de problemas. ¡Podrán imaginarse una aeronave! Un automóvil puede arrimarse al borde de la carretera. Una aeronave no tiene esa posibilidad.

En Cuba, suele hablarse mucho de los MIGs y poco de los helicópteros. ¿A qué atribuyes esa diferencia? ¿Cuál es el papel de unos y otros?

Te voy a ejemplificar con una anécdota:. En Cuba existían tres tipos de pilotos.

  1. a) los de la aviación de combate.
  2. b) los tripulantes de la aviación de transporte.
  3. c) la gente de los helicópteros.

Nuestros jefes militares, de ascendencia guerrillera (con muy pocas excepciones) despreciaban, casi por completo, a la aviación.. Entre las raras excepciones se encontraba el General Arnaldo Ochoa. Entre los que más despreciaban a la aviación, el general de división Pedro García Peláez (Pedro el malo). En Angola el que más depreciaba la aviación, en términos generales, era el entonces general de división Leopoldo Cintras Frías.

En la incompleta historia militar cubana, se enaltece Cuito Cuanavale y se obvian otros hechos como el desempeño de la aviación en Etiopía, durante la Guerra del Ogadén. ¿Qué pasó en Cuito Cuanavale, qué pasó en el Ogadén?

Aunque el mando militar cubano había advertido sobre la necesidad de evitar que la Fuerza de Defensa de Sudáfrica (SADF, por sus siglas en inglés) interviniesen, como ya había sucedido tantas veces, ocurrió́ lo inevitable; las unidades surafricanas entraron en combate.

La provincia angolana de Cuando-Cubango, toma su

El entrevistado (izda) junto a Benigno González Cortes en Angola
El entrevistado (izda) junto a Benigno González Cortes en Angola

nombre por encontrase situada entre los ríos de igual nombre, por lo que podemos catalogarla como una provincia mesopotámica. Jamba, donde se ubicaba el estado mayor de la UNITA, quedaba situada muy cerca de la franja de Caprivi, que es franco territorio de Namibia.

Si estas Brigadas de Infantería Ligera (BIL) de las FAPLA, hubieran sido apoyadas por las correspondientes unidades de helicópteros, jamás hubiera cantado el «Galo Preto*”, ni hubieran tenido, los surafricanos, la oportunidad de intervenir en la contienda. La historia de los cañones G-5 y G-6 hubiera sido bien diferente.

Un arma, tan moderna como son los helicópteros, fue menospreciada por el alto mando militar soviético. Menosprecio similar cometido por el alto mando cubano.

En ningún momento se utilizaron los helicópteros para contrarrestar los medios autopropulsados surafricanos y por el contrario, se desgastaron en la utilización de la aviación de combate que no estaba designada a tal efecto.

Los aviones Mig 23 y Mig 21 tienen muy pocas posibilidades en el combate aire-tierra, ya sea por su impresionante velocidad de vuelo, como por su escasa capacidad ofensiva.

La cruda realidad es que, estas aeronaves, fueron diseñadas como caza-interceptoras, con posibilidades limitadas de actuar en variante de cazabombarderos. Pero su función primordial es la interceptación de la aviación enemiga, mientras que los helicópteros MI-24, fueron diseñados para el combate contra medios blindados.

Ante el empuje de las brigadas FAPLA, las tropas de la UNITA huyeron desaforadamente hasta llegar al paso obligado del río Lomba, donde las unidades FAPLA fueron atacadas por las SADF, retrocediendo en desbandada hacia el único puente existente a tres kilómetros al sur de la confluencia de los ríos Cuito y Cuanavale.

Cualquier persona con preparación militar sabe que cuando (derivada de las acciones combativas) las tropas huyen en desbandada, generalmente se pierde la guerra. No fue el caso.

¿Por qué esa excepción?

La retirada desorganizada de las brigadas FAPLA comenzó́ aproximadamente el 15 de octubre de 1987, pero -increíblemente- no fueron perseguidas.

La guerra de Angola, como muchas de las guerras que han ocurrido en el llamado Tercer Mundo, no era una guerra convencional, aunque pudiera parecerlo a los menos entendidos.

En primer lugar, el soldado angolano (fuese FAPLA o fuese FALA) no tenía el sentido de patriotismo o nacionalidad que asiste a los soldados de países que hace mucho tiempo superaron la fase tribalista de la historia.

Y en segundo lugar, debido a su bajo nivel de instrucción académica y acervo cultural, tanto las tropas de la UNITA como las del MPLA, aunque tuvieran armamento de última generación y habían sido capaces de asimilarlos, se mostraron incapaces de darles la adecuada utilización; aun con la ayuda de los asesores soviéticos y sudafricanos.

De igual forma ocurría con los cuadros de mando. Cuando las FAPLA comenzaron la operación, los cubanos solo teníamos un grupo táctico reforzado en Menongue y una escuadrilla de aviación compuesta por cuatro aeronaves MIG-21*; incluido un avión de entrenamiento.

Las unidades FAPLA, que venían en retirada desde el río Lomba, se reagruparon a unos 20 kilómetros en la margen este del río Cuanavale, formando un arco defensivo*.

La escuadrilla (cuatro aeronaves) no participaba en la operación “Saludo a Octubre” porque formaba parte de una operación llamada “Olivo” consistente en combatir a los insurgentes de la UNITA (bandas guerrilleras). Lo que, en Cuba se conoció como “Lucha contra Bandidos (LCB). El MIG-21 UTI derribado (Teniente Coronel Manuel Rojas García) cayó fuera del Teatro de operaciones militares de la provincia de Cuando Cubango (Cuito Cuanavale). El derribo de Rojas (a la sazón jefe de la sección de aviación de la DAAFAR en la MMCA) ocurrió en las cercanías del poblado de Luvuei, a más de 200 kilómetros de Cuito Cuanavale.

No participé en Etiopía, pero tengo algunas referencias de mis compañeros pilotos, participantes en las acciones combativas.

 Escuchándote sobre Cuito Cuanavale, recordé que Fidel Castro acusó públicamente al general Ochoa (1989) de desatender la guerra para ocuparse de negocios y que ese supuesto abandono de responsabilidad, lo obligó a mandar a Polo Frías como jefe del Frente Sur. ¿Fue justo Castro?

Totalmente falso. Ochoa estaba al mando de la Misión, desde septiembre de 1987, o mucho antes, tendría que precisarlo.  El Frente sur (FS) se creó, bastante después. Antes del frente sur, existía una cosa que se llamaba ATS, Agrupación de Tropas del Sur, con sede en Huambo. Y el FS solo se crea, luego de que el general (de brigada) Cartaya (José García) que, se encontraba en Huambo, avanzara hacia Cuito Cuanavale con su Brigada de tanques.

En tu libro “La Guerra Innecesaria, Mesopotamia angoleña, Ruacaná*” explicas porqué Fidel Castro miente al hablar de Cuito Cuanavale como un solo frente. Los lectores de El Vigía de Cuba son muy jóvenes, ¿a qué atribuyes ese desliz de Castro?

Fidel Castro mentía, cuando hablaba de Cuito Cuanavale, porque lo hacía como un “todo incluido”, para no tener que dar explicaciones sobre el avance hacia Ruacaná. Muchos autores, siguiéndole la corriente a Fidel, llegan a decir que los dos flancos, del Frente Sur, cooperaban entre sí. Falso también, porque ambos flancos se encontraban separados por cientos de kilómetros y el terreno no era favorable para tal cooperación combativa.

¿Cuál fue el peso real de Cuba en el fin del apartheid?

En mi libro lo explico, se ha sobredimensionado. Sudáfrica estaba al borde de la quiebra económica por la segregación de la población negra y sus dirigentes más pragmáticos sabían que renunciaban al control totalitario de la economía y la sociedad o se hundían, como le pasó al comunismo en Europa del este.

El apartheid necesitaba mucha mano de obra asequible y liberaba a los negros y evolucionaba o se extinguía; por tanto, el papel de Cuba fue un granito de arena, engrandecido por la propaganda oficial.

En el ámbito militar, Fidel Castro sabía que en el frente sur oriental no había otra opción militar que firmar empate; tablas en términos ajedrecísticos, y así se hizo para poder comenzar el desplazamiento por el flanco sur occidental, buscando la hidroeléctrica de Ruacaná. Con ese objetivo, se construyó -en tiempo récord- el aeródromo de Cahama y se repararon los de Xangonfo, N´Giva para poder usar los aviones MIG-23 BN (Flogger H; especializado en ataques a tierra).

¿Las cifras de bajas cubanas que publicó Sudáfrica son fiables?

En toda guerra, las cifras de bajas son tendenciosas de ambos lados. Las muchas bajas cubanas a las que se refieren los sudafricanos son falsas y desproporcionadas. Tuvimos más bajas por negligencias, ingestión de bebidas alcohólicas, accidentes de tránsito y enfermedades, que por acciones combativas, como detallo en mi libro.

De tu vida de piloto de helicóptero, ¿cuáles fueron tus mejores y peores momentos?

Mis mejores momentos. Los momentos de volar. Los peores momentos: Encontrarme con un jefe de tropas que me cuestionara cualquier decisión que fuera a tomar, referente al vuelo.

Anécdota: Un día que íbamos hacia Cuito Cuanavale, el jefe de la escolta del general Ochoa me dijo: “piloto vuela bien, mira que aquí va el general Ochoa. Mi respuesta: “yo vuelo bien siempre, porque me quiero más, a mí, de lo que pudiera querer al general.

Ochoa me escuchó, y esbozó una sonrisa cómplice.

¿Por qué vives en Portugal?

Vivo en Portugal, porque fueron unos amigos portugueses los que me ayudaron a salir de Cuba, por vía legal.