NO ES ILEGÍTIMO ANHELAR LA IGUALDAD POLÍTICA PARA TODOS LOS CIUDADANOS

ARCHIVOSNO ES ILEGÍTIMO ANHELAR LA IGUALDAD POLÍTICA PARA TODOS LOS CIUDADANOS
Por René Fidel González García
La Habana.- No es ilegítimo pensar y creer en la necesidad de poner fin y proscribir a las estructuras legales, institucionales, culturales y simbólicas que establecen, garantizan y reproducen la desigualdad política de los ciudadanos en una sociedad.
No es ilegítimo evidenciar a otros la ausencia de igualdad política en una sociedad.
No es ilegítimo hacer entender a otros el problema fundamental que es que se defraude de forma sistemática o selectiva el derecho de igualdad política de los ciudadanos.
No es ilegítimo advertir a los que instituyen, garantizan o a los que disfrutan de la desigualdad política, que ello es en realidad un privilegio político que no nos hace diferentes, sino desiguales. No es ilegítimo interpelar el cinismo y la hipocresía.
No es ilegítimo entender y explicar a los indiferentes que la desigualdad política es una condición para un fin: la exclusión política, y que nadie está nunca realmente a salvo (tus amigos, hermanos, padres, abuelos, hijos) de ser excluido políticamente en algún momento porque la naturaleza de la exclusión es la arbitrariedad y su instinto es un goce de la impunidad.
No es ilegítimo demandar jurídicamente la igualdad política.
No es ilegítimo exigir políticamente la igualdad política.
No es ilegítima la solidaridad que se ejerce ante las consecuencias que sufren otros por la ausencia de igualdad política.
No es ilegítima la fraternidad con los que son reprimidos, castigados, agredidos o vilipendiados por la búsqueda para todos de la igualdad política.
No es ilegítima la búsqueda de un consenso social para poner fin a la ausencia de igualdad política.
Hay verdades elementales en Cuba. Aunque nunca ilegítimo, todo esto es, sin embargo, ilegal, y también terriblemente odioso y aborrecible en una sociedad en que los ciudadanos han sido privados de la igualdad política para impedirles el ejercicio de la libertad y los derechos políticos, en que la exclusión política se ha instaurado y erigido sistema para el monopolio del poder, sin poder evitar, no obstante, su degeneración y la mediocridad de sus operadores.
Existen verdades elementales, y cuesta y es difícil siempre y en cualquier parte, sostenerlas.
Se arriesga y se pierde mucho por ello, pero esas verdades suelen ser lo esencial del programa político, del manifiesto y la rebelión de los excluidos en la reconquista de la igualdad política, algunas de las circunstancias que eligen y el resplandor de los tiempos futuros.

Check out our other content

Check out other tags:

Most Popular Articles

Verified by MonsterInsights