Por Oscar Durán
La Habana.- Acaban de entrar 60 toneladas de harina en la provincia de Guantánamo, así lo informó el periódico Venceremos. Según el medio oficialista, de esta forma se estabiliza en todos los municipios la producción del pan en el mes de marzo. Sí, guantanameros, en pleno 2024 tener pan es un milagro y también noticia de portada.
La harina la trajeron de otros parajes allende los mares y, de milagro, algún sesudo no salió en cadena nacional diciendo que ha sido un esfuerzo sobrehumano conseguir tal cargamento. Estos descarados no producen nada como gobierno y tampoco lo dejan hacer. No les conviene, vamos a estar claros.
Que nadie en Guantánamo cante victoria todavía porque dentro de los próximos 15 días comerá pan diariamente. La situación energética es muy complicada y las panaderías necesitan corriente para encender los hornos. Se habla de buscar alternativas y ahora mismo ni el primer secretario del Partido en la provincia sabe lo que va a hacer.
Las isla es un caos. Nadie da la cara ante este monumental desastre. Vaya, aunque sea para decirnos que estaremos en esta situación hasta dentro de 65 años más. ¿Qué son 60 toneladas de harina para una provincia? En abril, volveremos a comer piedra de nuevo. Estamos de migajas en migajas, como si fuéramos unos presidiarios del Combinado del Este o de Kilo 8.
“Este mes no se garantiza la leche, ni cárnicos para dietas, de hecho, en febrero, solo se dio el 50 por ciento de las dietas a los casos especiales con enfermedades crónicas de la infancia y a las embarazadas”.
Eso dice el Venceremos sin ningún tipo de complejos. Ya ni maquillan las informaciones. ¿Saben cómo se llama la obra? “Les cogimos la bajita y cuidadito con decir algo”. Díganme, ¿qué más difícil debe ponerse la situación en Cuba para reclamar, mínimo, nuestro pan de cada día?
Y no es solamente el pan. Es todo. Ahora mismo, a algunos territorios guantanameros le están entregando 10 onzas de frijoles y chícharos, tres libras de arroz y tienen pendientes todavía las dos míseras libras de azúcar faltantes en febrero.
Este nivel de migajas es asombroso. Si el aceite de febrero no ha llegado; el café ni lo mencionan dentro de la canasta básica, los apagones siguen y no dan tregua, entonces pregunto: ¿cuál es límite de la paciencia del cubano?
Una última cosa: donde dije Guantánamo, pueden sustituirlo por La Tunas, Granma, Artemisa, Pinar del Río y todo el circuito nacional desde San Antonio a Maisí.
MIGAJAS
