Oscar Durán
Cuando el esposo de Marian la mató, yo tenía 7 años. Corría el año 1995 y el pueblo cubano estaba atravesando una de sus mayores crisis económicas. Hoy tengo 34 almanaques y acabo de recibir la noticia de que ese mismo hombre mató a otra mujer, justamente cuando la isla pasa, posiblemente, por la crisis más difícil de su historia.
No estoy diciendo que una cosa lleva a la otra, ni mucho menos voy a justificar el doble feminicidio de este asesino, pero cuando un país tiene tanta miseria, la miseria humana también se incrementa y llega a escalas altísimas.
El Gobierno tiene mucha culpa en esto. Están más preocupados por el que grita ‘Abajo la Dictadura’ que por un ladrón o un criminal. Yo estoy seguro de que estas dos mujeres hicieron todas las denuncias correspondientes, pero el Estado falló en todas sus línea: policía, fiscalía, los ‘supereficientes’ Comités de Defensa de la Revolución (CDR) de Gerardo Hernàndez y hasta la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) tienen lo suyo aquí.
Hace unos días, una joven de 17 años salió corriendo pidiendo auxilio a la policía y su expareja la mató frente a la mismísima Estación y ante los agentes, sin que estos lo impidieran. Ayer un expolicía también acabó con la vida de una inocente ¿Qué otra prueba hay que tener para culpar al Gobierno de todos estos crímenes? En lo que va de año, ya hay reportados nueve femicidios.
Ahora mismo la Mayor de las Antillas no es un lugar seguro. Si sales a cualquier lugar, sabes que estarás expuesta o expuesto a un asalto que puede acabar con tu vida. Expuse el tema del femicidio, pero pueden ser otros como el arrebato de un celular, el quite de una cadena a punta de cuchillo, o que te caigan en pandilla y te roben tu moto eléctrica o el carro. Así anda nuestra isla.
