Jorge Sotero
Miami.- La llegada de José Abreu a los Astros de Houston, últimos campeones de las Grandes Ligas, ha generado debate en algunos círculos sobre el turno que pudiera ocupar el cienfueguero en el orden al bate del equipo, teniendo en cuenta que en la nómina hay bateadores consagrados con grandes aportaciones en los últimos años.
El veterano Dusty Baker es un manager tradicionalista en cuanto a las alineaciones. Con él es casi imposible que Yordan Álvarez sea un día el primero en la tanda, tal como hace Aaron Boone con Aaron Judge, por ejemplo.
Baker, puedo apostar, saldrá con José Altuve en segunda, Jeremy Peña en el campo corto, y luego con Álvarez o el antesalista Alex Bregman, quienes pudieran ocupar los puestos tercero y cuarto, pero Pito muy bien pudiera colarse entre ellos y batear como cuarto tras el tunero.
Es solo una opción, porque el turno de Pito pudiera estar más abajo, incluso. Digamos que podría alinear como quinto, o incluso como sexto, heredando el mismo puesto de Yuli Gurriel, que alineaba por detrás de Kyle Tucker.
Todo eso, sin embargo, depende de la temporada que tenga el cubano, que podría formar con Yordan Álvarez el mejor uno-dos de los cubanos desde tiempos inmemoriales.
Abreu tuvo un mal año en impulsadas y jonrones en 2022, pero mantuvo alto su promedio ofensivo, con unos Medias Blancas que salían como grandes favoritos en su división, pero que no fueron a más, sobre todo por el bajo rendimiento de algunos, como Yoan Moncada, y las lesiones de algunos otros, como Luis Robert, Eloy Jiménez, entre otros.
Baker contrató a Abreu para que juegue, porque sabe que el cubano puede aportar mucho a la ofensiva y como jugador de equipo, como hombre comprometido, que siempre intenta darlo todo en el campo. Lo otro depende del cubano.
Si arranca bien, y mantiene un ritmo alto en cuanto a carreras impulsadas y jonrones, pudiera hasta terminar de cuarto y tener un peso importante en la alineación de un equipo que vuelve a salir como favorito para ganar la división, la Liga Americana, incluso la Serie Mundial, por más que se le haya ido el mejor de sus lanzadores, Justin Verlander.
De cualquiera manera, faltan unos dos meses para el inicio de la temporada de las Grandes Ligas, y saber de los planes de Baker con Abreu, que ha sido el mejor bateador cubano de los últimos 10 años y el más grande desde el retiro de Rafael Palmeiro.
