Por Oscar Durán.
Voy a dejar algo bien claro desde el inicio: el tema principal del equipo Cuba al Clásico Mundial no es la exclusión de Yasmany Tomás. Aquí lo fundamental es que se logre reunir un conjunto competitivo y que todo un país vuelva a ilusionarse con su deporte nacional.
Dicho esto, vamos a analizar el papelazo olímpico de la Federación Cubana de Béisbol (FCB) con respecto a Tomás.
Según Juan Reinaldo Pérez Pardo, presidente de la FCB, «Cuba recibió una comunicación de los organizadores del Clásico, donde se anuncia el otorgamiento de las licencias solicitadas por peloteros cubanos para que el equipo pueda inscribir en su nómina a los atletas antillanos, sean de MLB o no, que tengan residencia en Estados Unidos».
Excepto a dos o tres sopla tubos del régimen comunista que no les agradó la noticia, millones de cubanos saltaron de sus asientos al oír la nota. Más allá de la politiquería que rodea este asunto, algo de alegría se palpó en un país donde hay hasta escasez de preservativos.
A partir de ahí, rumores iban y rumores venían. Se especulaba de todo con respecto a los jugadores cubanos en la MLB, hasta que la Federación anunció una rueda de prensa -ay, las ruedas de prensa en Cuba- para dar a conocer la preselección de 50 jugadores.
La lista ya todos la conocemos. Como también conocemos que los encargados de dirigir el béisbol cubano no pintan ni dan color en esta historia. «De arriba» vienen las orientaciones y son «los de arriba» los encargados de descojonar el deporte nacional… y el país.
¿Se acuerdan la joyita aquella de los trajes de la Liga Élite que estaban y después no? Bueno, un tiempo corto después volvieron con sus «tallas» a granel.
Primero, Tele Rebelde corta la rueda de prensa cuando más interesante se ponía. Entonces no se pudo ver la parte en la que Armando Johnson, director del plantel, dijo que el exindustrialista Tomás no estaba en la lista porque se eliminó con Luis Robert para fortalecer la línea central. ¿Serio, Johnson?
Si se dan cuenta, aquí hay dos papelazos en uno: Luis Robert, de los mejores peloteros jóvenes en la MLB, no está para eliminarse con nadie. Está clavado en el equipo. El Tanque, por su parte, ahora mismo anda envuelto en una muy buena campaña en México. Es un pelotero que pasó por MLB y puede volver a estar. Además -lo veo así-, el solo hecho de que el habanero esté jugando otra liga muy superior a la Serie Nacional y la esté reventando, es suficiente para darle un puesto.
Y si no basta todo lo anterior, pues les digo más: lo llevo por encima de Yoennis Céspedes, ahora mismo lesionado y con sus mejores momentos muy lejos en el pasado.
Si yo fuera Tomás, pasaría la página. Duele, sí, porque el muchacho se creó ilusiones con volver a vestir el uniforme de las cuatro letras, pero ahora lo que le toca es enfocarse en retornar al sistema del mejor béisbol del mundo o lograr un buen contrato por Asia.
Mientras tanto, dejemos al capitalino a un lado, porque los invito a que sigan viendo la película de la FCB que aún no ha terminado. Fíjense si no ha terminado que Johnson acaba de anunciar que los jugadores convocados de las Grandes Ligas, aún no tienen asegurada su participación con Cuba porque pueden ocurrir cambios por parte de la MLB.
Definitivamente este filme lo transmiten por partes. Ya vimos que se ahogaron en un Tanque. Lo próximo está por verse.
