Por Anette Espinosa ()
La Habana.- El gobierno cubano anunció en la noche del lunes la destitución como vice primer ministro de Jorge Luis Perdomo Di-Lella, por supuestamente incurrir en «errores en el desempeño de sus funciones» y nada más.
En los últimos días se han producido renuncias y destituciones dentro de la dirigencia del partido y de gobierno, aunque sin darle mucho bombo, porque se ha tratado de esa nomenclatura intermedia, como ocurrió con el gobernador de Las Tunas, por ejemplo.
En otros casos, como en el de Rogelio Polanco, otrora jefe del Departamento Ideológico del partido comunista, no se ha dicho nada, tal vez porque no quieren que la gente sepa que por allá arriba todo se cae a pedazos y que la corrupción campea por sus respetos.
Lo cierto, sorprendió la destitución de Perdomo Di-Lella, considerado hasta hace poco como una de las personas con más capacidad de trabajo dentro de un gobierno inoperante, al frente del cual sigue Manuel Marrano, por más que no haya conseguido nada en casi un mandato y medio.
Llama la atención que la destitución de Perdomo se produjo horas después de la publicación de un artículo en Cubanet que explica todo y que podrá leer a continuación. Como la pieza de marras lo cuenta todo, no nos extenderemos más y se la dejamos acá:
MIPYMES EN EL PODER: LOS HERMANOS DI-LELLA
A HABANA, Cuba. – Durante la más reciente visita gubernamental a Cienfuegos, Manuel Marrero Cruz, primer ministro del régimen cubano, no tuvo reparos en culpar a los “millonarios” dueños de mipymes de agravar la corrupción en la Isla. Por su parte, Miguel Díaz-Canel, en conversación con funcionarios de la banca cubana durante su programa en YouTube Desde la Presidencia, concentró en los “nuevos actores” de la economía varias acusaciones en un tono de reproche y demonización que en algunos aspectos recuerda al que usara Aleida Guevara en mayo de este año cuando arremetió contra las mipymes por “entrañar riesgos de seguridad” y ser “fuentes de desigualdades en la Isla”.
Sin embargo, todos estos “señalamientos” —que se suman a los de otras figuras y altos funcionarios de la dictadura que tienen al “sector privado” como fuente de los males que azotan la economía cubana—, que no vienen acompañados de acciones concretas, medidas, leyes y decretos que ataquen el “mal”, dan la impresión de que apenas buscan actuar sobre la opinión pública y, de paso, aplacar el creciente descontento popular insistiendo en la falsa idea de que “régimen” y “sector privado” son dos cosas muy distintas, por momentos antagónicas.
En realidad, cada día, tanto en las redes sociales como en los medios de prensa independientes, se acumula una montaña de pruebas que señalan a las principales figuras de la dictadura como las manos que, directamente o por la vía de testaferros, mueven los hilos de las empresas “privadas” más exitosas y hasta más antiguas, algunas íntimamente relacionadas con empresas estatales o creadas a partir de estas bajo la máscara de “emprendimientos individuales”.
De estas últimas se han revelado unas cuantas como para confirmar que no hay casualidades: el bar-restaurante EFE, manejado por Sandro Castro; el negocio de rentas de casas de lujo de Vilma Rodríguez, nieta de Raúl Castro; el de las herederas de Antonio Núñez Jiménez; el imperio empresarial-familiar de Guillermo García Frías, camuflado tras la empresa estatal Flora y Fauna; el Gaia Mercado de Lisa Titolo Castro, hija de Mariela Castro y Paolo Titolo (representante del grupo Amorim, vinculado a los turbios negocios de Isabel dos Santos, hija de José Eduardo dos Santos), así hasta llegar a los “emprendimientos privados” de otros personajes de la dictadura de menor “abolengo”, como la tristemente célebre Media Luna, la mipyme de Ciego de Ávila asociada con el escándalo de corrupción que presuntamente condujo a la destitución de Alejandro Gil, ministro de Economía entre julio de 2018 y marzo de 2024.
Pero Alejandro Gil, aunque ha sido hasta hoy el único “castigado”, no es tampoco el único ministro o alto funcionario de la dictadura conectado directamente o a través de un familiar o amigo a un “negocio privado”.
Recientemente, CubaNet publicó el caso de Arturo Aliaga Céspedes, actual jefe del Departamento Jurídico de la Dirección Nacional de la ANAP, no solo vinculado a varias mipymes importadoras y distribuidoras de alimentos sino, además, a una campaña de desinformación que busca culpar al dólar por los altos precios y la inflación, a la vez que, bajo la superficie, intervienen como compradores-revendedores en el mercado informal de divisas a favor de sus negocios importadores.
Pero entre un funcionario de baja visibilidad mediática como Arturo Aliaga Céspedes y los miembros de la familia Castro (siempre bajo la lupa), en medio de ambos grupos, hay otras figuras “dirigentes” de alto relieve aunque no tan antiguas, más bien de la “nueva hornada”, que a pesar de ocupar altos cargos tanto en el Gobierno como en el Comité Central del Partido Comunista han logrado pasar casi inadvertidos precisamente por el corto tiempo que llevan en el desempeño de sus funciones.
Es el caso del ingeniero eléctrico Jorge Luis Perdomo Di-Lella, actual viceprimer ministro de Cuba, una función que le fue asignada desde el 20 de abril de 2021, tal vez como “premio” por su desempeño como ministro de la Informática y las Comunicaciones (cargo que ocupó desde julio de 2018, luego de haberse destacado como decano y director de Investigaciones de la Universidad de Ciencias Informáticas, UCI), habiendo dejado como legado de su gestión ministerial la puesta en práctica del Decreto-Ley 370, con el cual el régimen intenta legitimar la censura y represión en internet.
Negocios “privados” como “premios” a los Di-Lella
Además del cargo de viceprimer ministro, quizás el otro premio recibido por Jorge Luis Perdomo Di-Lella, en un momento en que los militares-empresarios se reparten el pastel, es recibir una tajada considerable a través de su hermano Yoel Perdomo Di-Lella, uno de los más importantes emprendedores “privados” en la Isla con participación en al menos tres empresas, una de ellas registrada en Panamá y en la Cámara de Comercio de Cuba como de “capital extranjero”, y las otras dos como mipymes y negocios “por cuenta propia”, enfocados en la elaboración, venta y distribución de alimentos, bebidas, artículos de ferretería y electrodomésticos.
Todo un imperio el de Yoel Perdomo Di-Lella que, de simple maitre del hotel Comodoro en los años 90, más una corta estadía laboral en la Marina Hemingway, pasó a trabajar bajo las órdenes de Abraham Maciques en el Palacio de Convenciones de La Habana, una oportunidad que le abrió las puertas del éxito a las sombras del poder, más cuando se convirtió en el mejor amigo de Alfredo Maciques Rodríguez y juntos asumieron la dirección de algunos de los tantos negocios oscuros del viejo Abraham, conocido por ser uno de los principales testaferros financieros de Fidel Castro.
Fue tanta la confianza depositada por Abraham Maciques y su hijo Alfredo en el joven Yoel Perdomo Di-Lella que ya para el año 2012 lo habían nombrado administrador del restaurante El Palenque, una importante dependencia del Consejo de Ministros que facturaba millonarias sumas de dinero junto con el Palacio de Convenciones, el recinto de exposiciones ExpoCuba, el hotel Palco y la incipiente empresa Palco S.A. que comenzaba a absorber la veintena de negocios que anteriormente pertenecían a Cubanacán y Cubalse, incluidos los servicios transitarios, de importación, y de paquetería a los cuales, por la infraestructura que maneja Palco S.A., están obligatoriamente conectadas todas las empresas de envíos a Cuba desde el exterior, incluidas las que tienen sede en Estados Unidos.
A su paso por El Palenque, Yoel Perdomo Di-Lella demostró su capacidad para hacer dinero pero sobre todo su lealtad y discreción para con los negocios de Abraham Maciques. De acuerdo con testimonios de personas que trabajaron junto a él en aquella época, entrevistados por CubaNet bajo condición de proteger sus identidades, Yoel no solo llevaba las riendas de El Palenque sino que tenía a su cargo la supervisión de todos los eventos importantes celebrados en el Palacio de Convenciones.
“Le consultaban todo. Era una máquina de hacer dinero. Muchas cosas por las cuales Abraham era felicitado por Fidel [Castro] en realidad eran ideas de Yoel. Por eso es que siempre cuando ves el nombre de Alfredo [Maciques], en el negocio que sea, ahí está la mano de Yoel. Siempre lo llevaban a todos lados”, asegura una de las fuentes entrevistadas.
En agosto de 2014, el semanario comercial cubano Opciones entrevistó a Yoel Perdomo en su papel de administrador del restaurante El Palenque, considerado para esa fecha como “la mayor paladar de La Habana”, con los mayores ingresos en Cuba por ventas que superaban los 14.000 CUC (dólares) diarios, así como unos 6 millones de CUC anuales.
Pero el gran momento de Yoel Perdomo como empresario “privado” llegaría unos años después con el arribo de su hermano Jorge Luis al cargo de viceprimer ministro en abril de 2021. Apenas unos meses después, en agosto de ese mismo año, Yoel fue nombrado director de Camax Chile S.A., una supuesta “sucursal extranjera” que en febrero de 2009 la chilena residente en Cuba Carolina Rau Freraut, amiga de Alfredo Maciques, había registrado en Panamá como propia, cuando en realidad es una off-shore dependiente del Grupo Palco S.A. (De hecho, el teléfono de contacto de Carolina Rau Freraut [7204 4735], de acuerdo con los registros de ETECSA, se encuentra localizado en el Palacio de Convenciones).
2021: el gran salto de los Di-Lella
Camax Chile S.A. fue asentada en los registros tributarios panameños bajo el número 1525971165251682, y en su último informe disponible ―del 12 de julio de 2021― se establece el cambio de Alfredo Maciques como “apoderado”, luego de que se mantuviera como “especialista comercial” de la compañía mientras su padre llevaba las riendas del negocio.
Pero en 2021, apenas cuatro meses del nombramiento de Jorge Luis Perdomo, Yoel es ascendido en Camax Chile S.A., sustituyendo a su amigo Alfredo Maciques que, establecido en España como parte de su trabajo para Palco S.A., cumplía el encargo de abrir un par de empresas para la importación a Cuba de alimentos con destino al turismo pero, sobre todo, de partes y piezas de autos y motos, en especial equipos ligeros de tracción eléctrica, es decir, de buena parte de las motocicletas y ciclos eléctricos que hoy comercializa Palco S.A. en sus múltiples establecimientos.
Si el 20 de abril de 2021 Jorge Luis Perdomo Di-Lella se estrenaba en su cargo de viceprimer ministro de Cuba, también en España lo hacía Alfredo Maciques en su “nueva” empresa. El 23 de abril de ese año creaba Why Not Yoseloenvio SL (con registro B05406863), una especie de remake de otra empresa suya creada en 2019 bajo el nombre de Why Not Enterprise Corporation SL (Registro: B88519160), en la cual aparece como “administrador solidario” de un negocio que tiene su verdadero epicentro en Palco S.A.
En agosto de 2021, Yoel Perdomo abrió su primera paladar “privada” (El Bodegón del Asado), que ya cuenta con dos establecimientos en La Habana, uno en Playa y otro en La Habana Vieja, según consta en los registros de “restaurantes gestionados por TCP” publicado en formato PDF por el periódico Tribuna de La Habana.
Yoel Perdomo también obtendría, un par de años más tarde, la autorización mediante la Resolución 392 de 2023 del Ministerio del Comercio Exterior, para inscribir en La Habana una oficina de representación de la compañía “panameña” Camax Chile S.A. (es decir, la contraparte “panameña” de Palco S.A.), según consta en la Gaceta Oficial No. 124 Ordinaria de 2023, un acto legal que apenas sería la formalización de un negocio que ya existía como parte de la propia Palco S.A. y que, según consta en la prensa del régimen, ya funcionaba como proveedor principal de bebidas y alimentos de alta calidad en los más importantes eventos relacionados con el turismo en la Isla.
El 19 de septiembre de 2019, por ejemplo, la revista Excelencias Gourmet, en un artículo que reseñaba el evento Varadero Gourmet 2019, presentaba a Yoel Perdomo como “vicerrepresentante” del Grupo Camax Chile. En aquel momento, el hermano del viceprimer ministro fue el encargado de la “presentación y cata de vinos, elaborados a partir de uvas que no se encuentran actualmente en el mercado nacional, [provenientes] de algunas de las bodegas representadas por el grupo Camax Chile”.
Ese mismo año, en octubre, igual de acuerdo con la prensa del régimen, su nombre fue mencionado en el Festival del Habano y la Fiesta del Vino celebrados en el Hotel Nacional. Sin embargo, ya para 2021, su cargo cambió de “vicerrepresentante” a “director para Cuba” de Camax Chile S.A., aunque la chilena Carolina Rau Freraut se mantenía como directora en los registros panameños, aunque solo en su papel de prestanombre.
A Carolina Rau Freraut se le asocia además como dueña del restaurante Donde Juan, situado en calle 78, entre 5ta. y 5ta. A, en Playa; y a la empresa Neruda International Corporation (de Panamá). Su relación de testaferro con el régimen cubano se remonta a los años 80 y viene a través de su esposo, Darío Melindi, cuyo nombre aparece asociado a Arsia International S.A., una empresa inscrita en 1987 por Rodolfo Dávalos —el abogado de los Castro—, en los registros mercantiles de Panamá. Tanto Dario Melindi como Rodolfo Dávalos ocuparon cargos de dirección en la misma compañía, así como coincidieron en el Grupo Solways, la representación cubana de Meliá para el mercado latinoamericano hacia la Isla.
Tuambia SURL, el negocio de “compras online” de Yoel Perdomo
Yoel Perdomo Di-Lella, licenciado en Turismo y Consultoría Gerencial de Empresas Turísticas que comenzó como maitre del hotel Comodoro, hoy es el dueño, además, de la pequeña empresa de compras online desde el exterior Tuambia SURL, según aparece registrada bajo su nombre con el número 4160, del 8 de julio de 2022, en el listado de mipymes publicado y actualizado por el Ministerio de Economía y Planificación.
Tuambia SURL es promovida por el propio Yoel Perdomo desde su perfil de Facebook como una empresa de envíos y compra de alimentos para Cuba, como una tienda online “de alimentos, aseo, ferretería y electrodomésticos” que tiene “servicio de mensajería a todos los municipios de todas las provincias”. No obstante, el objeto social con que fue registrada establece que se trataría de un negocio de “elaboración de productos cárnicos y sus derivados”.
A Tuambia SURL pertenece, además, el servicio de comida rápida a domicilio Jámazon (título que intenta parodiar el nombre de Amazon). Todos emplean la logística de Palco S.A. para la distribución, importación, y almacenamiento de mercancías.
Nota: CubaNet intentó contactar a Yoel Perdomo, pero hasta el momento de la publicación de este reportaje no había contestado.