Por Lisbet Mejías
Miami.- El anuncio reciente del Secretario de Estado, Marco Rubio, tiene a la oposición cubana del Cóncavo y el Convexo corriendo por los portales porque ya es oficial que el Departamento de Estado supervisará directa y solamente a un 17 por ciento de los programas que sobrevivieron al recorte de la USAID.
El 83 por ciento de los restantes, que se habían beneficiado con el cuento de llevar la supuesta libertad y democracia a la isla, sencillamente quedaron cancelados. En pocas palabras: volaron como Matías Pérez , guardaron el muñeco o simplemente, ¡se murió!
Y para que vean que no estaba equivocada cuando los califiqué de corruptos, es el propio medio digital POLÍTICO quien denuncia que se les ordenó a los funcionarios de USAID que aún están siendo auditados por DOGE a que destruyan toda la evidencia posible para evitar más escándalos.
Cuando algo así ocurre es porque el nivel de corrupción es superlativo. Ninguna persona honesta se ve en la necesidad de destruir evidencias. Solo los delincuentes y los que tienen miedo.
Imagino que ante esta orden de desaparecer evidencias más de uno que se benefició de Grants estará menos nervioso y más feliz, pero en realidad hablamos de un acto delictivo que puede dar pie a otras investigaciones.
Quizás Boronat y compañía se hayan tomado un par de cervezas para festejar esta desaparición de evidencias, aunque les recuerdo que hoy, con los avances tecnológicos, casi todo es respaldado en la nube.
Ahora que se acabó el dinero, la pregunta obligada es si seguirán los mismos de siempre intentando hacer “Patria” como lo han venido haciendo varias décadas atrás recibiendo dinero federal sin mostrar más resultados que viajes al extranjero, participaciones en eventos internacionales y, sobre todo, demasiada publicidad en los medios de Miami.
La realidad es que están desesperados. Ya no saben qué hacer luego de recibir el último paquete de dinero retenido tras una decisión medio rara de la Corte Suprema. Pero es el último. Ya no hay más.
Y como resultado de estos cambios drásticos, la nueva estrategia en redes sociales es la de pedir al exilio y seguidores que donen dinero para continuar “ luchando por la causa cubana”, como si drenar 200 millones del contribuyente americano no hubieran sido suficiente en los últimos años.
Y aunque es ya redundante, quien mejor ilustra esto es José Daniel Ferrer, presidente de la transición dentro de Cuba que ya no le basta con todos esos montajes escénicos que hace sino que ahora, sin ninguna vergüenza, está por sus redes pidiendo a la cara recargas con números de teléfonos específicos. Hace solo unos días igual lanzó un post con lenguaje inclusivo, presuntamente, para ir ganando la atención de aquellos grupos europeos que exigen esta agenda (woke) a cambio de un pequeño financiamiento de proyectos sociales.
La única conclusión que podemos sacar es que la oposición cubana se ha convertido en un parásito que dejó de cumplir su misión histórica de oponerse al régimen por un lado y por el otro educar al pueblo en exigir sus Derechos Constitucionales y así hablar de un enfrentamiento real contra la dictadura.
Lamentablemente hoy lo único que les preocupa es el dinero, financiamiento del exilio y ahora, recargas telefónicas como si eso fuera lo único importante.
Se puede ir la luz una semana, no hay qué comer pero lo más importante son las recargas para grabar las congas populares y venderlo al exilio como actos de protesta contra el régimen.
Hace mucho que la oposición perdió el rumbo y abrazó el wokismo que ha quedado demostrado que no es lo que la gente quiere. Con la llegada de Trump en su segundo mandato el mundo cambió!! y nuestra oposición no se ha dado cuenta. No se han actualizado y actúan tan “cheos” como los pepillos de los años 80s.
Nada de lo anterior permite cambios reales en Cuba porque no ayudan a la creación de conciencia en el pueblo para exigir libertad.
Trump aún no cumple dos meses en su administración pero ha dejado claro que va por otro rumbo y veo a la oposición sin poder conectar con los cubanos y con demasiados problemas para reinventarse y asumo que será peor porque sencillamente se acabó el dinero.
Sin ese financiamiento que hasta ayer se entregaron sin exigir resultados , esos canales dedicados a impulsar a la oposición ( los mismos de siempre) ¿seguirán haciéndolo?
Hay muchos cubanos a los que les interesa la libertad de Cuba y realizan activismo político desde su propio bolsillo, levantándose temprano a trabajar duro y sin condicionar el deseo de ver a Cuba libre sin un Grant Federal.
Ahora sí veremos quién verdaderamente hace patria. Creo que se abre una nueva oportunidad para que otras voces comencemos a ser más visibles porque sabemos cómo hacer activismo usando nuestro propio sustento.
Lo que hay que cuestionar de todo esto es si este despilfarro quedará impune, sin ver actos de justicia o que rueden las cabezas de los responsables que deben sentarse en el banquillo de los acusados en cortes americanas. Lo menos que se puede hacer es exigirles, en nombre del pueblo cubano, que devuelvan todo ese dinero que han usado si exhibir un solo resultado real.
La historia una vez más nos vuelve a dar la razón. Si el empobrecimiento de Cuba ha sido el pago a EEUU por habernos ayudado en la guerra de independencia contra España, ¿qué podemos esperar cuando nos hagan el cambio de régimen que tanto piden y al que tan acostumbrado están los Estados Unidos a crear en otros países?¿En manos de quiénes nos van a dejar?
La respuesta parece ser más clara a partir de los encuentros del alto funcionario del Departamento de Estado, Mike Kozak con esa nueva oposición que solo habla de derechos humanos y transición pacífica pero que se niega a hablar de rescatar la República y su Constitución de 1940.
Hemos perdido el rumbo tanto en el Cóncavo como en el Convexo. Ahora que se acabó el billete vienen por el dinero de nuestro bolsillo sin pudor alguno, para promover proyectos viejos y reciclados tan inservibles como Pasos de Cambio de Rosa María Payá que no es más que un apéndice a su proyecto original Cuba Decide. Ellos siempre creativos en darnos más de lo mismo pero para nada pueden mostrar su alcance en la isla con miembros activos en la oposición al punto tal de organizar protestas exigiendo la LIBERTAD DE CUBA.
Entonces, cómo esperar una acción contundente en la isla si aquí vemos el resultado de las políticas de Obama con su intercambio cultural, al punto tal de que hoy vemos reflejados en el carnaval de la Calle 8 de Miami la vulgaridad musical de una conga que en Cuba estaba supuesta a ser una protesta. Ese Festival, que fue orgullo de los exiliados cubanos, hoy es el vivo ejemplo de la infiltración, la falta de valores y de cómo han mezclado todo en la cabeza el del cubano. El ejemplo más reciente se redujo, en esa celebración, a una conga con la misma consigna de “Oye Policía Pin… y Díaz-Canel Sin…..con rostros jóvenes y felices tal y como los vemos en pleno apagón alrededor de una caldosa en medio de la calle.
Aprendan que protestar por la libertad no lleva música ni mucho menos baile. Llevan gritos y reclamos con contexto político.
Aún así, tengo esperanzas. Sin dinero, estos que se auto titularon líderes mientras tenían Grants y el favor de los medios a los que supuestamente pagaban para levantarles el perfil, no creo que tengan la valentía de hacer Patria por amor a la libertad. En cambio hay muchos cubanos que hace años venimos haciéndolo con nuestros propios recursos y parece que Dios, finalmente, nos ha escuchado.
Como siempre digo, muy fuerte todo.
