Por Joaquín Márquez ()
Bayamo.- Los sucesos de los últimos días en Río Cauto han sacado a la palestra las maniobras sucias del castrismo, entre ellas el accionar de la secretaria del partido en Granma, Yudelkis Ortiz, y de la gobernadora de la provincia, Yanetsy Terry Gutiérrez.
Ambas fueron a presionar a Mayelín Carrasco, la mujer que se paró en una tribuna improvisada para reclamar sus derechos, entre ellos el de tener alimentos.
La presión popular obligó a liberar a Mayelín, pero la secretaria del partido comunista y la gobernadora quisieron hacerse una foto con ella, como para que la gente viera que la liberaron por ambas y no porque el pueblo presionó. Incluso, en alguna web gubernamental dijeron que estaba muy contenta con la foto y que se retracta de todo lo que pasó
Ambas sabandijas se las arreglaron después para venderle chícharo y arroz a los riocautenses, como si esto fuera a resolver los problemas, a parar las quejas y el malestar de una población agobiada.
Hoy les dejaremos un texto tomado de la página de Facebbok de Miguel Díaz-Canalla, sobre Yanetsy Terry Gutiérrez.
«Amigos y amigas de Bayamo, Pilón, Niquero, Media Luna, Campechuela, Manzanillo y demás municipios de la provincia del Guanacayabo:
«Es necesario dar a conocer quién es esa señora, natural de Pilón, «gobernadora» de la provincia.
«Yanetsi Terry Gutiérrez, nació en el municipio de Pilón, el más atrasado de Cuba, rico en narcotraficantes, chivatos, matarifes de ganado mayor, tarrudos y putas de bajo coste o jineteras, como se les conoce cariñosamente.
«Antes de 1959 era una zona floreciente, con un central azucarero que producía uno de los mejores azúcares pardos del mundo, y que daba empleo a miles de trabajadores, tanto en la industria como en las plantaciones de caña, con decenas de camiones de las colonias hasta la fábrica de azúcar. Pero todo eso se fue al garete cuando el castrocomunismo se apoderó de todo lo que habían creado los cubanos con iniciativa y esfuerzo.
«Conociendo el contexto, sigamos dando a conocer el personaje que nos ocupa: Roqui, padre de la actual «gobernadora», se desempeñaba como director de la empresa de Comercio y Gastronomía, mientras su madre ejercía como dependienta en una tienda del estado, el único dueño de todos los negocios en Cuba.
«Cedeño, un policía de la dictadura de Batista, perdón, de la dictadura revolucionaria, se personó en el local comercial conocido como «Tuyo y mío», exigiéndole a Roqui, padre de la actual «gobernadora», que le entregara una caja de ron, así, por su cara, a lo que habría de negarse el Director de Comercio y Gastronomía, plantando cara de esta forma, a las pretensiones del esbirro.
«Cedeño, sin contemplaciones, sacó la pistola que llevaba a la cintura, y le disparó tres veces, dos al pecho y una a la cabeza, derribando a Roqui, quien cayó al suelo ensangrentado y agonizante. Nada se pudo hacer para salvarle la vida.
«Su mujer quedó embarazada de 8 meses, llevando en su vientre al nefasto personaje que nos ocupa, la actual «gobernadora» de la provincia del Guanacayabo.
«Posiblemente, ni ella misma conoce estos hechos, que son de dominio público, y que guardan en sus recuerdos todos los piloneros.
«Pero había que recompensar de alguna forma a la hija del asesinado, aún cuando no se le conoce un solo mérito que hubiera justificado su nombramiento.
«La recuerdo como si fuera ahora mismo, cuando en las mañanas se levantaba con las patas por el suelo, las pasas desgreñadas como un enjambre enfurecido, los ojos llenos de lagañas y una peste a meao que no había dios que se le acercara.
«Resulta que fuimos vecinos durante algunos años, coincidiendo con su adolescencia, porque vivíamos enfrente uno del otro, solo separados por una estrecha calle.
«Ella ha llegado a los estamentos más altos que puede encumbrar una dictadura, sobre todo en su afán de saldar la deuda de la muerte de su padre.
«Tampoco ella se ha preocupado por conocer estos hechos que aquí relato, ya sea porque no le interesa conocerlo o por simple complicidad con esa dictadura que le regaló el importante cargo. Pero es muy triste traicionar la memoria de un padre, por quedar bien con un régimen que ha hundido a Cuba en la más absoluta miseria y ruina.
«Ayer esta esbirra colaboró en el lavado de cabeza y, seguramente, también amenazó a esta infeliz mujer de Río Cauto que había sido detenida por gritar en plena calle la situación de miseria y hambre que está pasando ella y sus tres hijos, a la que obligaron a retractarse y fotografiarse con ella y la primera secretaria del PCC en la provincia.
«Este hecho habla claro de la indecencia y la falta de vergüenza de estos servidores del régimen represor y genocida de Cuba.
«Hoy todo Río Cauto se eriza, pero de vergüenza».
