Nueva York.- Una enigmática estructura cuadrada en la superficie de Marte, fotografiada en 2001 por la Mars Orbiter Camera a bordo de la sonda Mars Global Surveyor de la NASA, ha reavivado la imaginación de los entusiastas de los extraterrestres, después de que Elon Musk comentara la imagen en la plataforma de X, afirmando que era una «oportunidad para una misión humana al Planeta Rojo para investigar la naturaleza de esta formación particular».
«Deberíamos enviar astronautas a Marte para investigar!», escribió el jefe de SpaceX, respondiendo a una publicación del podcaster Joe Rogan que compartió la imagen marciana que había estado circulando en las redes sociales después de ser publicada en Reddit.
La fotografía ha sido ligeramente retocada, para mejorar el contraste y hacer más visibles los bordes del cuadrado, a partir de la imagen original publicada en el sitio web del Mars Image Explorer de la Universidad Estatal de Arizona.
Lo que lo hizo viral fueron los comentarios de algunos usuarios sociales, quienes estimaron que la estructura cuadrada mide 235 metros de lado y tiene una pendiente de 51,5 grados, números que recuerdan a los de la Gran Pirámide de Giza en Egipto.
En realidad, todavía no se ha descartado que se trate simplemente de una formación geológica completamente natural, similar por ejemplo a las grandes rocas cuadradas y rectangulares que se crearon en la Tierra en un lugar cercano a la capital de Tasmania.
Después de todo, no sería la primera vez que una imagen tomada en Marte es malinterpretada, dando lugar a teorías completamente engañosas.
Ya ocurrió con la famosa fotografía tomada por el orbitador Viking 1 de la NASA, que en 1976 capturó una roca que se asemejaba a un rostro humano debido a un particular juego de luces y sombras.
En 2015 causó mucha discusión la supuesta pirámide fotografiada por el rover Curiosity, que según los expertos era en realidad una roca angular similar a las rocas volcánicas encontradas en Hawái o Islandia.
El caso más reciente se remonta al pasado mes de septiembre, cuando el rover Perseverance de la NASA fotografió una formación rocosa que algunos habían comparado con un rostro humano.
Estos malentendidos son a menudo el resultado de un proceso mental, llamado pareidolia, que nos empuja a reconocer formas familiares en objetos o perfiles de formas aleatorias». (ANSA)