Por Manuel Viera ()
La Habana.- A mí me pueden llamar como quieran, pero no me cansaré de hablar de la necesidad de cambio que tiene mi país.
Insisto en que no tiene razón de ser ni justificación posible un sistema político que en 65 años no ha podido ir hacia adelante.
No es viable un sistema político que en más de seis décadas habla ahora de fogones de carbón, de extensores de yuca, de apagones planificados y más allá de producir y exportar apenas sobrevive de las remesas que envían los que un día a punta de huevazos y repudio abandonaron el país.
¡Llámenme como quieran! Cuba necesita cambios políticos urgentes. Urgentes para su pueblo no para quienes se acomodan detrás de consignas y loas a la resistencia.
El socialismo es inviable, el modelo cubano es y será una utopía que jamás garantizará bienestar a su pueblo.
¡Llámenme como les dé la gana! Jamás seré un fanático que niegue la realidad para solo ver excusas y justificaciones que ya lucen eternas y más increíbles que Harry Potter.
