LA LIBERTAD, LA LIBERTAD… SIEMPRE LA LIBERTAD

CUBALA LIBERTAD, LA LIBERTAD… SIEMPRE LA LIBERTAD

Por Luis Rodríguez Pérez ()
Quivicán.- No puedo odiar a nadie, y odio con fuerzas al Tirano. Porque no es la crueldad del hombre dirigida a mí lo que me importe. Grande es mi Patria, nada es Luis.
El «cambio fraude» es un fraude, es un sueño, un invento, eso no existe. Sabe muy bien el Tirano, que no puede retirarse tranquilo y tranquilo, entre el pueblo, vivir. Por eso es que ha destrozado a mi familia. Por eso las visitas a María Cristina Garrido son con una guardia, en firme, al lado de la mesa.
¡Y hace bien el Tirano, porque está custodiando a un monumento! Porque el Tirano sabe que tiene que matar o morir, por eso son los 14 años a Lisandra Góngora. Veo por tierras extranjeras a cubanos hablar de amor, de democracia, de igualdad, de tolerancia ¡y están matando a mis hermanos! A veces creo, que solo el Tirano sabe que estamos en guerra.
No existe el tal «cambio fraude», lo que sí existe son los «agentes de opinión». Por ejemplo, como Buena Fe, que habla de problemas en su «Catalejo», pero no grita, Libertad. Y sabemos, que solo la Libertad es la solución de los problemas.
No existe ese cacareado «cambio fraude «, existen las lágrimas de mi pueblo convertidas en dólares. Y sabemos que, cuando estalle la Libertad, muchos «hermosos patriotas» sin dólares quedarán.
No existe el cambio fraude, ¡pero sí queda en mi Pueblo Dignidad! Yo, puedo hablar de eso; yo, la conozco ¡Yo sé dónde está! Aún, me llama la Dignidad desde el Guatao, aún me llama desde la Isla de la Juventud ¡Que yo he tocado con mis propias manos a la Dignidad, allá, en San José de las Lajas! He almorzado con la Dignidad en bata de doctor, allá, en el Vedado, por Jalisko Park. ¡Que el padre de la Dignidad es un negro de la Güinera! Que la Dignidad son las madres valientes, las verdaderas madres. Que la Dignidad son mis hermanos del exilio, de pequeños nombres y corazones y miradas seria. Hay mucha dignidad en las calles de Cuba y hay mucha Dignidad tras las rejas.
¿Tendría balas el revolver de Martí? Para los «hermosos hermanos» que hacen llorar a mi Angélica, aquí está mi rosa blanca. La rosa blanca siempre estará en mí para los hombres egoístas, ambiciosos y crueles. No los odio, no sé, no te puedo odiar. Pero, para el Tirano, para todo lo que se relacione con el Tirano, aquí está mi odio y mi rencor eterno y mi grito de siempre:
¡MIL VECES, LIBERTAD!
(En la foto de Portada, Angélica junto a veteranos, héroes de lucha contra el Comunismo; y junto al cardenal de la República Checa, quien fuera amigo íntimo de nuestro Oswaldo Payá)

Check out our other content

Check out other tags:

Most Popular Articles

Verified by MonsterInsights