Por Oscar Durán
La Habana.- Nada más supe la caída nacional del Sistema Electroenergético, me vino a la cabeza el cumpleaños del joven revolucionario Sandro Castro. A estas alturas, no sé si se suspendió o todavía está en pie, aún no tenemos noticias oficiales, pero ojalá nos informen con tiempo porque hay varias personas interesadas en ir al bar EFE a darlo todo junto a la clase burguesa.
A nadie le puede coger de sorpresa la realización de la esperada fiesta, más allá de la situación actual del país. Los Castro siempre se han cagado en el pueblo. Ni la molestia en las redes sociales de Pedro Jorge Velázquez, El Necio, ni el apagón nacional, van a impedir que el niñito de papi y mami celebre sus primaveras. Si ya está decidido y cuenta con el visto bueno de Raúl Castro, la isla puede estar sin luz que mañana el EFE prende sus mejores galas. Es como el eslogan de la zafra del ‘70: de que van, van.
En todo esto, muero por conocer la opinión de Miguel Díaz-Canel. Sabemos que no tiene autoridad para decidir nada y mucho menos después de enterarnos que su hijastro lo está dando todo en España junto a su Ana de Armas. Sin embargo, algún punto de vista debe tener sobre el cumpleaños de Sandro, aunque solo lo diga frente a la Machi a puertas cerradas.
Desde hace rato vengo pensando que entre ellos allá arriba hay su chanchullo de poder. Está la familia directa de Fidel Castro, la de Raúl y la de Canel. Algún dime que te diré hay, principalmente por parte de la familia de Fidel, que está viendo cómo se van quedando poco a poco sin poder, aunque tengan aún todos los lujos habidos y por haber.
Quizás por eso, el revolucionario de Sandro Castro, a nombre de su familia cercana, quiere probar fuerza y dejar claro que ellos todavía son los que son y van a realizar el cumple así llueve, truene, relampaguee y no haya electricidad. Mañana lo sabremos.
Para mí, sí habrá cumple. En la villa de los Castro todo es permitido dentro de la burguesía y se debe asimilar tal como está estipulado. A El Necio, decirle que, por favor, borre su publicación y ofrezca unas disculpas sinceras. Sandro no es así porque quiere, a él lo enseñaron a ser así. Querer quitar a Fidel o a Raúl de esto, decir que el nieto no tiene nada que ver con la ética de su abuelo, es una equivocación total de El Necio, el típico hombre nuevo marxista, ofendido por el cumpleaños de un Castro, pero con unas cuantas millas voladas, llevando “la verdad” de Cuba al mundo y comprando el último Iphone made in USA. Otro cara de guante más.
Por eso, le envío muchas felicidades a Sandrito. Que la pase súper mañana. Cuando apague las velitas y pida un deseo ojalá y sea que en el próximo cumpleaños nadie haga un cartel anunciando la celebración”. En definitiva, esa propaganda no la necesita un joven revolucionario comprometido con las ideas martianas de Fidel, Raúl y Díaz-Canel.
