Redacción Internacional
Nueva York.- El controvertido multimillonario Elon Musk compró un complejo secreto de mansiones en Texas, donde también ha instalado gran parte de sus operaciones empresariales, con el fin de reunir allí a sus once hijos mientras no descarta tener más herederos, obsesionado como está con el descenso de la natalidad mundial.
Musk, afincado estos días en Pensilvania ayudando a su amigo Donald Trump a volver a la Casa Blanca en los comicios del 5 de noviembre, ha dicho a personas cercanas que prevé que sus hijos y dos de sus tres madres ocupen propiedades contiguas para que los menores formen parte de las vidas de sus hermanos, y de esa forma podría programar tiempo para estar con ellos, según el diario The New York Times (NYT).
Una de las madres, Shivon Zilis, ejecutiva de Neuralink, la empresa de tecnología cerebral de Musk, ya se ha mudado a una de las casas con sus hijos. Sin embargo, Claire Boucher, la cantante canadiense conocida como Grimes, madre de tres de sus hijos, está inmersa en un prolongado pleito legal con Musk por la custodia de los hijos y hasta ahora se ha mantenido al margen, señala además el NYT.
La familia de Musk
La primera esposa de Musk es Justine Musk, con la que tiene cinco hijos mediante fecundación in vitro, método al que recurrieron tras la muerte de su primer hijo, Nevada, que nació en 2002 y falleció en su infancia, un tema del que el multimillonario no quiere hablar. También otros hijos de Musk han nacido por este método.
El diario destaca igualmente que el empresario de 58 años ha tratado de mantener en secreto su creciente familia, tanto que ni su padre, Errol Musk, que vive en Sudáfrica, ha podido conocer a uno o dos de sus nietos cuando ha viajado a Texas para visitarlos, según indicó en su biografía publicada en 2023.
“No he conocido a uno o dos de ellos porque siguen siendo secretos”, dijo Musk padre, de 78 años.
Obsesión con el descenso de nacimientos
La obsesión del dueño de X, Tesla y de la empresa de aeronáutica SpaceX con el descenso en nacimientos es tal que ha ofrecido su propia esperma a conocidos y amigos, entre ellos a la candidata independiente a la vicepresidencia de EE.UU. en las elecciones de este año, la abogada Nicole Shanahan, excompañera de papeleta de Robert F. Kennedy, oferta que ésta rechazó.
“Debería considerarse una emergencia nacional tener hijos”, ha dicho en ocasiones a través de la red X, de la que es propietario, al exhortar a sus seguidores a tener hijos porque Musk considera que habrá un colapso demográfico mundial que acabará con la humanidad.
El NYT recuerda que en una biografía publicada en 2015, a Musk le preocupaba que la gente inteligente no tuviera suficientes hijos. “No digo que sólo la gente inteligente debería tener hijos. Solo digo que la gente inteligente también debería tener hijos”, señaló en esa ocasión.
Defensor de la fecundación in vitro
“Me he dado cuenta de que muchas mujeres muy inteligentes tienen un hijo o ninguno. Uno piensa: ‘Vaya, eso probablemente no sea bueno’”, dijo Musk, defensor de la fecundación in vitro, de la que ha dicho que “es una forma más eficiente de tener hijos porque permite a los padres controlar parte del proceso”, según el diario, que cita a una persona que comparte su forma de pensar.
De acuerdo con el diario, Musk ha aumentado su alarma por el descenso de nacimientos en EE.UU y otros países que en 2021 donó 10 millones de dólares a través de su fundación a la Universidad de Texas para estudiar las tendencias de fertilidad y la población.
“Hago todo lo que puedo para animar a más gente a convertirse en padres y, de ser posible, tener tres o más hijos, para que la humanidad pueda crecer”, publicó en febrero. (EFE)