MANTILLA ES OTRA COSA

LECTURASMANTILLA ES OTRA COSA

Por Gretell Lobelle ()

Mantilla.- Agradezco a ustedes, los de los mensajitos. Todos los que han entrado. Respondía a un amigo: «Gracias, amanecer con tu mensajito me hace sentir humana.» Mira, para mí, es lo más bonito que he tenido en estas horas. No importa cuán asincrónico sea. Esos son el verdadero abrazo, el afecto que reconozco.

Agradezco no leer post, no cargarme de comentarios, no tener medios de comunicación; ha sido un alivio, una suerte de estar en presencia y centrada, ocupada. Las lecturas de conocidos siendo mesías, eso sí me drena; me resta en la supervivencia. Hemos estado tanto tiempo siendo políticos que se nos ha olvidado, en situaciones límites, ser primero humanos. Espero poco y trabajo mucho para no esperar nada del otro.

Estas horas me ponen en perspectiva. No me duelen algunos, solo los veo más ocupados en un comentario que aliviando con un mensaje a sus amigos. Esos que viven Cuba juzgando, desde el pasado o desde la distancia, una absurda manera de vivir, pero allá ellos. Yo, resingá, practico ser feliz porque no soy Cuba.

Estoy bien. Todo lo bien que se puede estar sin corriente. Estoy bien porque en Mantilla hubo servicio de agua en el 2000 y tengo aprendido el uso de agua almacenada. Cociné una parte de lo que tenía que pudiera echarse a perder y regalé la otra. Nada extraordinario; nada que no se haga cada día en Mantilla, donde la gente, con esta adversidad y antes, ha estado mal.

En Mantilla no llega la luz; será de los últimos sitios donde la pongan. Mantilla es otra cosa. Estoy todo lo bien que se puede estar; me sostengo desde la emoción, que es lo más importante. Agradezco mis privilegios, tengo agua, gas, comida, alguna luz de equipos. Lo reconozco cada vez que empiezo a tener alguna sensación de ansiedad. He visto en estas horas una vez más, la necesidad absoluta.

Tengo cierta carga en el móvil, aprovecho par agradecer porque no durará una noche más. Las chicas de la tienda, con las cuales siempre soy amable, me reconocieron y ayudaron. No quise abusar, somos muchos y esto es por un rato largo.

Tengo a Laura en Matanzas en comunicación, así que cuando hago matriz de ponderación sé lo importante e inmediato.

Cuba no solo tiene que cambiar su sistema eléctrico; los hijos de esta tierra tienen un largo camino de conciencia y presencia que cambiar. Somos un pueblo extremadamente acodado en lo externo. Perdimos el rumbo propio. Andamos con una vibra que nos aleja de un destino, de un propósito más humano, más amable

Gracias, gracias, gracias… Sigo sin corriente, solo ciertas luces (también sombras) que me sostienen.

Check out our other content

Check out other tags:

Most Popular Articles

Verified by MonsterInsights