NOS QUEDA UN UNO POR CIENTO

CUBANOS QUEDA UN UNO POR CIENTO

Por Oscar Durán ()

La Habana.- Hace rato lo vengo diciendo y no me canso de repetirlo: la dictadura está haciendo de todo para derrumbarse y nosotros no queremos darle ese empujón definitivo. No sé qué otra cosa deben hacer estos desvergonzados para que nos llenemos de valor y los mandemos bien lejos, de una vez y por todas.

Hoy tenemos un déficit de generación eléctrica de 1,678 MW, récord absoluto para una nación sin comida, medicamentos, educación, agua, gas. La verdadera conquista de la revolución: un país desgraciado, a punto de empezar a comernos entre nosotros mismos.

Claro, pero los dirigentes no se amilanan ante tanto desastre. Ahora Miguel Mario Díaz-Canel parte en su avión a Rusia para participar en la cumbre de los BRICS y virará lleno de optimismo, diciendo que ahora sí, que ya se acabaron todas las angustias para el pueblo y “pronto” veremos los buenos resultados. 

La palabra “pronto” es engañosa, porque ya conocemos de sobra las mentiras de estos sinvergüenzas. Cuba está en tinieblas, pasando por el momento más triste de su historia, sin embargo, los dirigentes andan como si nada, hablando de resistencia y burlándose de un pueblo hambriento.

Hace unos días un buen amigo me decía que la próxima fase es el canibalismo. A estas alturas, no dudo nada. Hay que estar aquí para saber cómo es vivir en esta odisea, llena de carneros -empezando por mí- camino directo al matadero. 

Pasamos de tener internet y ver el desarrollo del mundo, a vivir como aborígenes esclavizados y cocinando con marabú los sancochos de comida echados a perder que algunos podemos darnos el lujo de tener.

Se nos va la vida resistiendo y resistiendo. Ya son varias las generaciones de cubanos nacidas bajo un régimen totalitario justificando su estado fallido con el comodín de siempre: el bloqueo. Si no hacemos nada como nación, mejor que nos acaben de dar un tiro de gracia y así terminamos con este sufrimiento.

Se acabó todo en Cuba, hasta la vergüenza. La sociedad cubana actual da lástima. Somos unos chancleteros pendientes a un Telegram de la empresa eléctrica para saber cuándo nos toca tener electricidad. Si este no es el final, andamos a un 99 por ciento. Nos queda un uno por ciento y en cualquier momento quedamos en cero. Ya no damos más.

¿Hasta cuándo será esto? Ya me da lástima hasta con Bernardo Espinosa. Lo están cogiendo para el trajín. Es más, si yo fuera Bernardo, me fracturo una pierna y pido certificado por seis meses. Total, anda haciendo papelazos todos los días y la Unión de Periodistas no le dará ni un certificado de papel carbón.

Para finalizar y no extender más el sufrimiento, quiero recordarles algo: cuando se hable de terrorismo y de genocidio en el mundo, no duden en poner a Cuba como primer ejemplo. Tener a un país sin luz, es genocidio. Y tener a un país sin todo lo demás, es terrorismo.  

Check out our other content

Check out other tags:

Most Popular Articles

Verified by MonsterInsights