EL TAIGER LUCHA POR SU VIDA Y LOS MEDIOS EN CUBA NO LO SABEN

CUBAEL TAIGER LUCHA POR SU VIDA Y LOS MEDIOS EN CUBA NO LO SABEN

Por Ricardo Acostarana ()

La Habana.- Daños cerebrales irreversibles. Una bala. Orificio de entrada y de salida. Información confusa. Parte médico y policial estoico, escueto. Un crímen. Un ajuste de cuentas. Un posible sospechoso o dos o cien.

Artistas del gremio, prensa, amigos, fanáticos que llegan y se reúnen en la entrada del Jackson Hospital. Algunos encienden velas, rezan, graban, hacen promesas, reproducen su música que suena como un mantra. El reparto del Taiger mueve y goza de buena cosecha tanto en La Habana del Norte como en la del Sur.

A mí realmente no me importa ahora mismo la persona que es José Manuel Carvajal, aunque lo detesto. A mí me importa que el Taiger salga y cuente qué es estar cerquitica de la mona y que se recupere y siga dando palo en el reparto.

Yo he hablado mal de José Manuel Carvajal porque no me inspira nada como ser humano y porque ha hecho cosas incoherentes, cosas que parecen rozar cierta militancia.

Sin embargo, el Taiger pone la bala donde pone el ojo y las pega todas y a veces hasta perreo con él y veo a la gente a mi alrededor coreando sus temas y teorizando el por qué del problema X en que se volvió a meter.

José Manuel Carvajal es un padre que ama a sus hijas hasta dónde sé. Al Taiger le fascina ser un punto incómodo en la farándula de aquí y de allá.

José Manuel Carvajal sufrió y lloró la muerte de su madre como el mejor hijo del mundo.
El Taiger ha tenido bateos gordos con la justicia de allá, pero también con la de aquí. La droga y la guapería y la política y la libertad de expresión no es la misma cruzando el charco, pero el Taiger se las ha arreglado.

José Manuel Carvajal ha sufrido depresión porque también tiene 206 huesos. El Taiger va y viene a Cuba y da conciertos y se mete en líos y mete pasos cheísimos y se burlan de él y se ripea en un beat con Aldo aunque Aldo lo destripe y tiene muecas de militante, pero también el Taiger tiene 206 huesos.

Uno aprende a separar al artista del hombre, aunque a veces parezca imposible.

Daños cerebrales irreversibles. Una bala. Orificio de entrada y de salida. Información confusa.

En la prensa cubana no dicen nada de lo sucedido. El Taiger y José Manuel Carvajal, a los efectos de la Cuba de la prensa y la televisión, no existe.

Es una verdadera lástima que su carrera termine de esta manera, ojalá no así su vida. Pero a mí me gusta equivocarme y esta vez también quiero hacerlo.

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