Redacción Internacional
Tel Aviv.- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, exhortó este lunes a los libaneses, en un videomensaje, a abandonar las zonas donde el movimiento chií libanés Hizbulá almacena armas.
«Tengo un mensaje para el pueblo del Líbano: Israel no está en guerra con ustedes, sino con Hizbulá. Durante demasiado tiempo Hizbulá los utilizó como escudo humano, colocó cohetes en sus salas y garajes. Estos cohetes y los proyectiles apuntan directamente a nuestras ciudades y a nuestros ciudadanos», dijo Netanyahuí.
El premier israelí subrayó que el Estado hebreo debe eliminar estas armas para proteger a su pueblo y recordó el llamado de esta mañana de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para que los libaneses abandonaran las zonas donde están desplegadas las armas de Hizbulá.
«Les insto a que tomen en serio esta advertencia. No permitan que Hizbulá ponga en peligro sus vidas y las de sus seres queridos. No permitan que Hizbulá ponga en peligro al Líbano», manifestó.
Por otra parte, el gabinete israelí anunció que está introduciendo una situación especial de defensa civil en todo el país debido a los ataques con misiles de largo alcance provenientes del Líbano, según informó la emisora estatal Kan.
Con este paso, el Gobierno y el ejército reciben «amplios poderes» necesarios para salvar vidas humanas, «como permanecer en refugios, prohibir las reuniones, restringir la actividad laboral», explicó el referido medio.
Anteriormente, en el norte de Israel aprobaron las instrucciones similares en el ámbito de la defensa civil debido a la escalada del conflicto con Hizbulá.
Las tensiones entre el Líbano e Israel se intensificaron después de que el ejército israelí atacara el pasado 30 de julio una casa residencial en el barrio de Haret Hreik, en el sur de Beirut, destruyendo por completo el edificio. Entre los muertos se encontraba el alto comandante de Hizbulá Fuad Shukr.
Los días 17 y 18 de septiembre, en distintas partes del Líbano se produjeron explosiones de dispositivos electrónicos, incluidos buscapersonas y walkie-talkies, que dejaron más de 37 muertos y casi 3.000 heridos, según los datos oficiales.
Hizbulá y las autoridades libanesas acusan de esas explosiones a Israel, que no ha confirmado ni negado hasta ahora su implicación.
El 20 de septiembre, el ejército israelí lanzó un «ataque selectivo» contra la periferia sur de Beirut en el que fueron eliminados Ibrahim Aqil y otros 15 militantes de Hizbulá, entre ellos miembros de la cadena de mando de la Fuerza Radwan.
Los militares israelíes continuaron sus ataques los días 21 y 22 de septiembre.
Unas 5.000 personas en el Líbano resultaron afectadas por los ataques aéreos de Israel contra este país árabe en menos de una semana, informó este lunes el ministro interino de Salud libanés, Firas Abiad.
Además, la cifra de muertos durante los ataques aéreos de Israel contra el sur del Líbano de este lunes superó los 350, y la de heridos, los 1.240. (Agencias)
