Por Mauricio de Miranda ()
Cali.- Cuando veo este tipo de titulares (el de la foto interior) y leo luego el contenido de la nota, confirmo que quienes ejercen el poder político en Cuba insisten en estar desconectados de la realidad y lo que es peor, de las necesidades del pueblo.
Precisamente lo que no hemos visto por parte de ellos es una reflexión crítica de sus acciones. Por el contrario, siguen con el mantra de responsabilizar a otros con los problemas del país. Repiten hasta la saciedad que hay errores pero no reconocen los suyos.
Por otra parte, no salen del inmovilismo que provoca el dogmatismo con el que abordan el análisis de la situación del país, así es que acción es lo que no se ve.
Muchas discusiones, muchas proyecciones que no se sabe cómo pretenden lograrlas porque la realidad va en contravía, pero siguen ausentes las medidas imprescindibles.
Finalmente ¿resulta honesto y responsable hablar de la «vitalidad política y socio-económica de la nación» cuando todo se derrumba, no solo la economía, sino también la confianza del país y en el país y su capacidad para salir de la crisis?
En mi opinión, y esto lo digo con toda claridad, lejos de ser la autoproclamada vanguardia de la sociedad, son precisamente el principal obstáculo para salir de la gravísima crisis que afecta a la nación cubana.