Por Pedro Ulises Romero Torres (Tomado de Facebook)
La Habana.- Es increíble ver cómo nuestro país se presta para los «sucesos» más inverosímiles. No nos basta con contar a nuestro haber con la «DICTADURA» más grande de la historia de la humanidad, de ser el país más desigual del hemisferio y quizás del mundo; el más manipulado y vilipendiado, uno de los más hambrientos y sucios, y de otros calificativos que por vergüenza no voy a hacer mención.
Sin embargo, a mí me resulta inverosímil, que en medio de la profunda crisis, nos préstamos a romper un récord de baile. Mi asombro y bochorno al saber que hay miles de cubanos pasando hambre y durmiendo en la calle, y que hay cubanos que mueren por falta de atención y de medicinas, que nuestros niños no están comiendo como es debido en las escuelas, que si por casualidad en medio de la desesperación te vas a la calle a gritar y exigir tus derechos, te reprimen y condena a la prisión como un vulgar delincuente, que para nuestros dirigentes solo somos desechables, y en cambio seamos capaces, como si fuéramos unos bufones, a «romper» un absurdo récord de baile.
Me van a perdonar, yo amo mi patria, disfruto de su clima, sus tradiciones, su arte, su pueblo y sobre todo su música, pero yo no me presto a hacerle el juego a la Dictadura. Yo me presto solo para la libertad y después de lograda, de seguro habrá muchos ganas de bailar y romper todos los récord que aparezcan, y si te ofende mis palabras, usted no es más que un títere que se merece por lo que está pasando…
