Por Miryorly García ()
La Habana.- El mensaje de la foto debería bastar para que todo cubano que se respete y le quede un poquito de dignidad no fuera al desfile del 1ro de mayo.
Yo nunca he desfilado un 1ro de mayo, y aquí estoy, viviendo en Cuba, con la libertad que yo misma me autogestiono y garantizo, con el miedo de todos pero sin permitirme que ese miedo me haga traicionar mi verdad y mis principios.
Por tanto, yo sé lo que es posible hacer y lo que no. A mí que ningún hipócrita me venga con cuentos de que es obligado o que tiene miedo a perder escuela, carrera o trabajo, que yo me gradué en la UH y trabajo con el Estado, aunque no me importa ni me ha importado nunca que me boten, si es por hacer lo correcto, y eso está claro para mí y para quienes (me) dirigen.
El primero de mayo exigiré con más fuerza, dada la fecha, un trabajo con un salario digno, una vida digna para mí y mi familia, todos los derechos que nos corresponden como seres humanos y la libertad de los presos políticos en Cuba.
Para quienes dirigen solo tengo dos mensajes muy claros: conmigo no cuentan para seguir engañando al mundo y que haré todo lo que pueda y me atreva a hacer para que pierdan ese poder que intentan sostener a base de mentiras y represión.
¡Abajo la dictadura!