Por Pucho Oroza
Varadero.- En la segunda jornada del Abierto Panamericano de Judo con sede en Varadero, se realizó la despedida oficial de Yalennis Castillo, una de las estelares de la armada del profesor Veitía, de las imprescindibles del Judo Cubano, por 13 años dentro de la selección nacional.
Yalennis es el ejemplo exacto de superación, de coraje, consagración. Una guerrera nata, de las que no le rehúye al combate, ni dentro del tatami ni en la vida diaria. La gran madre, entrenadora, la guajira rebelde, la que no se rinde, como en aquella inolvidable final de ocho minutos en la que todos la vimos ganar o en su última olimpiada en Río de Janeiro, luego de su maternidad, lesiones, dejando el alma en un inacabable combate por el bronce.
Dijo adiós oficialmente la Subcampeona Olímpica de Beijing 2008, la dos veces medallista de bronce Panamericana, la Campeona de la Súper Copa del Mundo de 2008, cuatro veces Campeona Nacional, dos veces titular del Torneo Judoquis Dorado, dos veces Campeona del Panamericano del deporte y titular en los Centroamericanos de Veracruz 2014. La Mejor deportista del Año 2008 en Cuba.
Yalennis, que ganó mucho sobre el colchón, también ha sido una ganadora en la vida, con una familia más que unida junto a su esposo, Frank Camilo Morejón, e hijas. Pero además, ostenta el reconocimiento y el cariño de todos los cubanos, que saben reconocer el sacrificio y la entrega.
Ahora toca seguir formando Campeones desde el puesto de entrenadora, dando todo lo aprendido a las nuevas generaciones. Por lo pronto, gracias, Yalennis Castillo por una carrera ejemplar. Sabemos que con tu modestia, a pesar de tanta gloria, seguirás siendo la Guajira con Tumba´o. Ahí está tu mayor grandeza.
