Por Pucho Oroza
Varadero.- El 3 de abril de 1989 debutaba en Grandes Ligas Ken Griffey Jr., y que manera de estrenarse. Ese año conectó 16 jonrones e impulsó 61 carreras con un promedio de bateo de .264, terminando tercero en la votación de Novato del Año.
De 1993 al 2000, el junior tuvo un promedio de 52 jonrones y 136 impulsadas por cada 162 juegos jugados. En sus últimos cuatro años en Seattle, Griffey promedió 52 jonrones y 142 impulsadas por temporada. Incluyendo el récord para jardineros centrales establecido en 1997, cuando bateó 56 vuelacercas.
Del 2001 al 2006, en la cúspide de su carrera, Griffey se perdió un promedio de 70 juegos por temporada y desde el 2001 al 2010, el último año de su carrera, solo conectó 192 jonrones, aun así le alcanzó para sumar 630 vuelacercas en su trayectoria. Las lesiones le impidieron dar toda su calidad, a pesar de haber tenido una carrera de ensueño.
En nueve mil 801 veces al bate, disparó dos 781 indiscutibles, entre ellos 524 dobles, 38 triples y 630 cuadrangulares. Recibió mil 312 boletos, robó 184 bases, anotó mil 662 carreras e impulsó otra mil 836.
Terminó su carrera con AVE .284, OBP de 370, SLG .538, OPS 907. Su WAR fue de 83.8. A la defensa estuvo tres veces en el top ten en DWAR, ganador de 10 Guantes de Oro y del MLB Rawlings ALL-Time Gold Glove en 2007. Siendo uno de los dos únicos peloteros con al menos 600 home runs y 10 Guantes de Oro, junto a Willie Mays.
The Kid, fue 13 veces All Star, MVP del Juego de Estrellas en 1992 y tres veces ganador del Home Run Derby. Obtuvo siete Bates de Plata, fue MVP Liga Americana 1997. Premio del Comisionado de Grandes ligas y en 1999, y con tan sólo 29 años, fue elegido al Equipo del Siglo de la MLB.
Por si fuera poco participó en el Clásico Mundial del 2006 con Estados Unidos, siendo escogido dentro del WBC All-Tournament Team.
Fue el primer jugador en la historia en ser elegido al Salón de la Fama después de haber sido la selección número uno del Draft colegial y con el 99.3 por ciento de los votos, fue el porcentaje más alto para un jugador en Cooperstown del 2016 hasta que llegó el unánime de Mariano Rivera en 2019.
Que suerte la nuestra de haber podido verte jugar, «The Natural». ¡Una auténtica leyenda!
