Por El Estado ocmo tal
La Habana.- En medio de la crisis de seguridad alimentaria actual, la prensa oficial reporta visitas de dirigentes a entidades estatales y a una Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC), pero los reportes no dejan claro que la clave de recuperación agropecuaria es el sector privado.
En términos de actores nacionales, el agro es el único sector de la economía cubana donde no es válido el relato oficial de que la empresa estatal socialista es el “sujeto principal”. Es el privado, aunque la rigidez ideológica lo identifica como «personas naturales».

La primera reflexión que deberían haber hecho hace rato quienes deciden política agropecuaria en Cuba es cómo potenciar el sector nacional que desde hace tiempo tiene la primacía productiva, a pesar de no recibir prioridad, más allá de la retórica oficial ocasional.

No es adecuado centrar la estrategia en un localismo de supervivencia, incluso con MIPYMES en el agro. De nuevo, bastaría con mirar las cifras oficiales. La extensión promedio de una finca privada es 8,9 ha y en usufructo es de 5 ha. Con esa escala el modelo está estancado.

Lo esencial sería una definición clara de la prioridad de una transformación de un agro cubano en crisis. Los funcionarios pudieran tratar de responder si alguna experiencia histórica de crisis del agro estatista/colectivista fue resuelta con más estatismo, localismo y pequeña producción.