Por Abel Tablada
La Habana.- Felicitaciones a Anisley Torres por el análisis sobre Milei en Israel, la situación en Argentina y los problemas que tiene este nuevo período presidencial.
Lo disfruté mucho pero enseguida pienso en la forma muy diferente en que se abordan los problemas en Cuba, aún más críticos.
Ni la profundidad de análisis, ni las inteligentes ironías, ni la objetividad, el tener en cuenta la complejidad y las diversas aristas, se cumplen cuando se analiza la situación en Cuba, que en la gran mayoría de los casos se limita a justificar la situación por el bloqueo, o a criticar a los que incumplen o cometen errores, esos que están en lo más bajo de la cadena de mando.
Y no es que los periodistas que atienden la realidad nacional no estén preparados o no posean esas capacidades, se sabe el por qué no se pueden realizar esos análisis de forma pública, y la mayor razón es justamente por lo que hoy se critica la rabieta de Milei, su no tolerancia a lo diferente, a una opinión y voto del bando opositor.
En Argentina, al menos hay bando opositor sentado en el congreso para detener o suavizar los paquetazos neoliberales, las decisiones antipopulares o en perjuicio de la nación.
