MENSAJE A LOS CÓMPLICES Y TESTAFERROS

Toronto.- Y a pesar de todo, a pesar de la ruina, la tragedia y el hambre el Castrismo tiene todavía un grupo considerable de seguidores y cómplices. No hay estadísticas al respecto, pero desde la experiencia personal y lo que la calle transmite, entre un 25 % y un 35 % de los cubanos siguen mostrando su apoyo al Régimen. Ya sea por miedo (miedo al cambio, miedo a la represión), por estupidez, por desinformación, por oportunismo o por pura maldad la Dictadura cuenta con miles de Fans.

Un fuerte aparato de propaganda (el país no produce nada, aunque el dinero para eventos políticos y anuncios siempre aparece), la complicidad de sus “socios” fuera del país y el control de toda la economía aún le permite llenar plazas y convocar actos de repudio. Para todos esos trasnochados, focas amaestradas y miserables de segunda línea, este mensaje.

Ustedes deberían saber, lean un poco y revisen la historia, que nunca llegarán a ver la prosperidad y el paraíso prometido por esa Dirigencia que vive entre lujos y comodidades. El Estado no resolverá ninguno de los urgentes problemas que golpean a la sociedad, a Ellos lo único que les interesa es el Poder.

Mientras el Socialismo siga siendo la meta a la que se proponen llegar, todo irá siempre a peor, sus vidas se irán apagando entre la escasez, los apagones, las colas, la desidia, la vulgaridad y la miseria de siempre, quizás peor.

El Régimen que ustedes defienden, y por el cual están dispuestos a sacrificar hasta sus vidas, los utilizará mientras pueda para trabajar, para la publicidad si son famosos y reconocidos internacionalmente o para enviarlos a Guerras o Misiones de trabajo en las que son tratados como esclavos y les roba el 80 % del salario.

Una vez que haya pasado el minuto de fama, al momento que ya no rindan profesionalmente, cuando lleguen el retiro y la vejez, serán abandonados y olvidados, tirados en un rincón, en soledad, para esperar la muerte. Busquen las biografías del boxeador Douglas Rodríguez, del Dr. Álvarez Cambra, del velocista Osvaldo Lara, del modisto Raúl Castillo, del narrador deportivo René Navarro y de miles de veteranos de las Guerras de África.

 Ustedes no dejarán a sus hijos y nietos un legado del que sentirse orgullosos, ni una casa para que la familia crezca y se afiance ni un buen recuerdo en los tiempos de celebración. Su herencia será una pesada carga de ignominia y vergüenza. Nadie entre los seres queridos se sentirá honrado al pronunciar sus nombres.

El bochorno y el desprecio aparecerán en medio de un silencio amargo que les recuerda a Todos una y otra vez que ustedes fueron parte de la Mentira, del Crimen, del Miedo, de la Represión, de los Chivatos del Barrio. Sus nombres llevarán el estigma de la abyección y el olvido como destino.

 Y, por último, lo esencial: Todos sus esfuerzos, todo ese estúpido sacrificio en nombre del Líder y del PCC, toda esa energía gastada en hacer el mal y querer perpetuar el Sistema que ha provocado la peor Tragedia humana y material de la Nación, no habrá servido de Nada, todo fue en vano.

La Dictadura que todavía hoy ustedes apoyan caerá de una forma u otra, desaparecerá entre los escombros y los despojos que ella misma ha originado, y muchos tendrán que rendir cuenta frente a los Tribunales. Cuba volverá al camino de la Democracia y la Prosperidad, Cuba será Libre. La Libertad es el destino natural o divino del Hombre.