Por Lara Crofs ()
La Habana.- Hace apenas un par de días, cuando me dispuse a llevar más donaciones para la familia de Angelo y sus cinco hermanos, su madre notificó que no quería más ayuda, pues la presidenta del CDR y unos compañeros la visitaron y le dijeron que no debía recibir más ayuda de los “contrarrevolucionarios” pues le retirarían la chequera que el gobierno les otorga.
Se le explicó que gracias a la ayuda de un amigo, podía perfectamente prescindir de esa chequera, que él la cubriría mensualmente, pero no quiso, como tampoco estuvo de acuerdo a acceder a ser entrevistada por amigos, que pudieran visibilizar más su caso, para que así fuesen mayor las donaciones puesto que ellos necesitan de todo.
Esto no es la primera ni última vez que me pasa con una familia con tanta precariedad, pero me ha sucedido otras veces con ancianitos . Siempre intento separar mi labor humanitaria de la política, pero es muy difícil pues si este gobierno realmente no dejara a nadie desamparado, no existieran Angelos, ni mis ayudas serían cuestionadas por una presidenta de CDR y mucho menos por dos tipos desconocidos, que sabemos muy bien a lo que se dedican.
Entiendo perfectamente y me sigo solidarizando con la familia de Angelo. El miedo es una cosa terrible, aún más cuando te sabes desprotegido y abandonado a tu suerte. Mismo así saben cómo encontrarme y les reitero mi apoyo. En mi siempre podrán encontrar un plato de comida caliente y una muda de ropa limpia, además de lo que tenga a disposición en ese momento. Por ahora no puedo hacer más.
Seguiré ayudando y colaborando, con todos los proyectos y personas que puedan. Sepan que no están solos.
La ayuda que estaba destinada a estas personas será repartida entre las otras muchismas familias que apoyamos.