Bruselas.- El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, admitió este lunes que la situación actual en Ucrania se ha tornado difícil y admitió las grandes pérdidas sufridas por su Ejército a pesar de las entregas masivas de armas y otro apoyo de la Alianza.
«Estamos observando intensos combates. La situación a lo largo de toda la línea del frente, en particular en el este, es muy difícil, vemos un alto nivel de bajas», comentó Stoltenberg a los periodistas un día antes del inicio de la reunión de los ministros de Exteriores de la OTAN.
A su vez, el secretario general admitió que a la OTAN «le gustaría, por supuesto, que Ucrania liberara la mayor cantidad de territorio posible y lo antes posible», y dejó claro que la «responsabilidad de la OTAN es dar a (Kiev) una posición tan fuerte como sea posible, por lo que seguimos prestándole apoyo».
Por otra parte, destacó la importancia de no subestimar a Rusia: «Todo lo que observamos, incluso teniendo en cuenta este apoyo sustancial, no ha dado lugar a un cambio significativo en la línea del frente, lo que demuestra que no debemos subestimar a Rusia».
Rusia envió anteriormente a los países de la OTAN una nota, en la que el canciller, Serguéi Lavrov, advirtió que cualquier cargamento que incluya armas destinadas a Kiev se convertirá en blanco legítimo para las tropas rusas.
A pesar de eso, la OTAN continuó con su apoyo y durante muchos meses tanto Kiev como la OTAN hablaron de victorias en la línea del frente, sin embargo las tropas rusas siguen en el mismo lugar y Ucrania no ha podido hacerles retroceder, en tanto la guerra se acerca ya a los dos años.
