Por Gretell Lobelle
La Habana.- Hoy le di durísimo a La Habana, la obvié, la caminé y ni por un instante deparé en ella. Olvidé su aniversario.
La Habana hoy fue una ciudad como otras donde he estado. Hoy, el día con los colores más bonitos que me ha regalado Noviembre, me recordó nuevamente que la vida va de personas y no de sitios. Hoy fuimos nosotros, solo nosotros.
***
Si la Habana oliera a cannabis,
si tan solo pudieras elevarte por un instante a la ciudad que fue.
Cada día me voy reconociendo menos en ella.
Los colores se pierden,
ya no veo el color.
La Habana se me vuelve matices.
Sé que la luz de esta ciudad está ahí.
Subyace como presencia constante.
Puedo sentir el espíritu del sitio donde fui feliz.
Tal vez está noche tu risa rotunda silencie todos los sonidos que ya me son ajenos y regresen los colores.
La noche tendría que ser tu risa.
Extraño lo simple.
Una añoranza se va tejiendo
(la composición de tu presencia llenándolo todo)
Tantas ausencias diluyen el sentido de esta ciudad
Y sé que a la Habana le faltas tú.