Por Renay Chinea
Barcelona.- Mi novia se fue. Mis amigos se iban uno a uno y hasta de tres en tres. Todos se iban, se marchaban se largaban y era esa angustia de quedado en la parada, mientras los taxis se detienen, recogen a alguien, siempre a otros, te dejan y se van. Y otra novia y otro avión…! Este cuento lo estoy contando siempre así que no los vuelvo a agobiar.
Una mañana en 5ta y 20, en Miramar, una señora suiza me estampó en el pasaporte un visado con una banderita roja y blanca en mi corazón..! Me lo llevé al pecho, y aquella crucesita fue conmigo escuchando mi tuntún a pie y llorando no sé por cuántas horas hasta que me monté en aquel pájaro de aluminio que me arrancó de allí.! Edmundo Dantes y yo estuvimos media vida bajo el mal.!
Esta semana, finalmente, 20 años y una semana después.. llevé a mis hijos y a mi mujer al país que me dio la libertad..! Ha sido uno de los viajes más hermosos que jamás haya hecho…!
De algún modo siempre siempre, he estado viajando a allí…!
