Por Oscar Durán
La Habana.- Las mujeres cubanas no tienen nada que celebrar el 23 de agosto. Al contrario, ese día debieran organizar una marcha en todo el país para exigir más derechos, protección y justicia para esas víctimas inocentes asesinadas por un criminal de turno.
Aunque parezca un poco exagerado, el gobierno cubano ha dejado sola a sus féminas. Cada doce días, aproximadamente, hay un femicidio en Cuba reportado en las redes sociales. La Federación de Mujeres Cubanas (FMC) nunca se entera de estos hechos y por eso carga en sus espaldas la culpa de todas esas desgracias. Si se hace una investigación seria de muchos de los asesinatos ocurridos en este año, la mitad de ellos se pudieron prevenir si el Estado -dígase la FMC- hubiera protegido a tiempo a esas jóvenes.
¿Qué vamos a esperar de una cosa llamada Federación y no Ministerio de la Mujer? ¿Tú eres federada? ¿Qué beneficios te trae pertenecer a esa organización? Ninguno. Ya ni caldosa hacen por los CDR. Sin embargo, debemos aguantarle a la prensa cubana que Cauto Cristo recibió la distinción Vanguardia Provincial por estupideces como estas:
“Las cautocristenses cumplen todos los indicadores medibles, garantizan más del 90 por ciento de integración, ejecutaron más del doble, de los cursos de adiestramiento previstos, concluyeron con calidad el proceso XI Congreso y avanzan en la atención a las familias, y en la prevención de problemáticas sociales”, enfatiza el semanario La Demajagua.
Como ven, el nivel de descaro anda sin frenos en el régimen. Pasan por alto los femicidios del 2023 y tienen la desfachatez de no pedir, aunque sea, un minuto de silencio por las víctimas. Para entregar diplomas con una frase de Vilma Espín, tienen el uno. Incluso, dice el Granma que “las cubanas son y serán por siempre, vencedoras de lo imposible.”
Bueno, si leemos bien, el órgano oficial tiene razón. La mujer cubana sí es una vencedora de lo imposible, por su historia de maltrato a nivel social y gubernamental. Son prisioneras de sus propias historias y de sus tragedias. Es la herencia del castrismo, sin temor a dudas.
Aún no cerramos el 2023 y los femicidios van rozando la cifra de 60. Es una locura. Mientras la FMC siga repartiendo diplomas a federadas destacadas y haciéndose la de la vista gorda, los asesinatos aumentarán. La dictadura se olvidó de ustedes, mujeres. Desde hace muchísimos años.