Oscar Durán.-
Con la crisis de combustible que hay en Cuba y Miguel Diaz Canel se espanta tres viajes en un mismo día a Sancti Spíritus, Villa Clara y Cienfuegos. Y lo más lindo, no resolvió ningún problema a la población, pero se comió a mentiras a unos cuantos.
Por ejemplo, en tierras yayaberas encabezó la reunión donde se chequearon los compromisos contraídos desde el mes de enero, con el propósito de enfrentar la situación económica y lograr un mejor año para Cuba.
Si usted, estimado lector, piensa que yo le tomo el pelo, está equivocado. Eso ocurrió hoy. En primer lugar, ¿cuáles son los compromisos contraídos para enfrentar el desastre de la economía cubana? ¿Pudieron cumplirlos? ¿Dónde está la mejoría? Ahí se dan cuenta cómo estos dictadores siguen con los viejos métodos y no les importa seguir manteniendo al pueblo engañado.
Canel expresó -lo encuentro el colmo del descaro- “que las máximas autoridades cubanas están conscientes de las potencialidades existentes para que la nación pueda abrirse paso, a pesar del complejo panorama provocado por el recrudecimiento del bloqueo financiero y comercial de Estados Unidos y la crisis mundial. El tema es cómo nos vamos por encima del bloqueo con resistencia creativa, que es talento, que es esfuerzo”.
Otra vez se queda en el aire el presidente cubano. ¿Cuáles son las potencialidades, Miguel Mario? ¿Puedes enumerarlas? Con el hambre y las necesidades que hay de San Antonio a Maisí y tú hablando de potencialidades. A ver, dime: ¿a qué tu le llamas resistencia creativa, talento y esfuerzo, si no hay ´jama´ ni para aprenderse las vocales.
Cuando llegó el momento de dar las conclusiones, fue un cierre por todo lo alto, hasta me dieron ganas de ir a vivir a Sancti Spíritus. Sí, porque se cumplió el plan de vivienda, la mortalidad infantil está en cero, las exportaciones -no se sabe qué tipo de exportaciones son- marchan según lo previsto y el arribo de turistas continúa creciendo.
Al parecer, Diaz Canel se dio cuenta de tantas mentiras a ráfagas y soltó lo único interesante de la jornada: “la pelea es dura, pero hay que echarla y la vamos a ganar”.
Bueno, te voy a aclarar algo. La pelea está dura, la estamos echando desde 1959 y ustedes, dictadores de mierda, son nuestros enemigos. Lamentablemente no la hemos ganado, pero estamos cerca.
