Por Gesy Ortega
Santa Clara.- La muerte de un recién nacido en Santa Clara, supuestamente lanzado por su madre desde un balcón de la EIDE de Santa Clara, donde estudiaba, ha destapado miles de elucubraciones, incluso datos falsos, cualquiera sabe con qué intención, lo cual nos obliga a volver sobre el tema.
Mayency de Armas, la joven que tuvo a su bebé, supuestamente sin saberlo, en la madrugada de miércoles a jueves de la semana anterior, y que luego lo lanzó por el balcón, con la complicidad de algunas amigas o compañeras del equipo de baloncesto de la provincia para su categoría, tiene 17 años, y no 18, como quieren hacer ver algunos.
El Vigía de Cuba reveló en su momento que la edad de la madre era de 17 años y que no cumpliría 18 hasta septiembre venidero. La totalidad de los medios hace referencia a la segunda cifra, pero a esa aún no ha llegado.
https://www.facebook.com/mayensy.dearmas/about_contact_and_basic_info
Pues bien, la joven, que hasta hace unas horas estaba bajo investigación psicológica nació el 15 de septiembre de 2005, por lo tanto, hasta esa fecha del presente año no cumple los 18, una edad en la cual ya es considerada mayor de edad, y puede ser juzgada como tal.
Aunque «La Convención Internacional sobre los Derechos del Niño establece los 18 años como la mayoría de edad de la persona», tal principio no resulta obligatorio para los países signatarios, los que, en correspondencia con su idiosincrasia, tradición jurídica e intereses, pueden adoptar la edad que decidan, con la sugerencia de que, en caso de no coincidir con la contemplada en la convención, deberá proveerse a la persona menor de ese límite etario que es procesada penalmente», según el sitio Cubadebate, una de las voces del castrocomunismo.
El mismo artículo recuerda que «La ley penal cubana adopta los 16 años como la edad en la que el individuo responde penalmente», pero en un gráfico posterior añade un grupo de condicionantes, para que el infractor pueda ser procesado penalmente.
Entre ellos, como no podía ser de otro modo, si «se trata de hechos de una elevada lesividad social», «el delito se comete contra la seguridad del Estado o constituye un acto de terrorismo», o «si para su ejecusión, el comisor utiliza medios, modos o formas que denotan desprecio por la vida humana o notorio irrespeto a los derechos de los demás.
En este último acápite podría entrar el supuesto caso de Mayensy, en caso de que sea imputada por la muerte de su pequeño, el cual tuvo sin tener aviso previo, tal y como se ha corrido por las redes sociales, sin que haya pronunciamiento alguno de la policía o las autoridades.
Incluso, a los trabajadores de la EIDE le prohibieron hablar del hecho, ocurrido el mismo día en que un estudiante de 18 años, este sí, de la Escuela de Arte de Santa Clara, violó una niña de 13, que necesitó más de una docena de puntos de sutura en la vagina para reparar el daño.
Mayensy de Armas, como decía El Vigía de Cuba hace casi una semana, aún es menor de edad y habrá que esperar para saber cómo continúa su caso.