Londres. El Gobierno de Cuba se enfrenta a un desafío legal en el Tribunal Superior de Londres esta semana por la deuda pública impaga de la década de 1980. El caso de ocho días comenzó el lunes y fue presentado por la firma de inversiones CRF I Ltd.
La firma afirma que se le deben 72 millones de euros (64 millones de libras esterlinas) en dos préstamos otorgados a Cuba por bancos europeos durante la administración de Fidel Castro y denominados en marcos alemanes.
Las autoridades cubanas han llamado a CRF un fondo buitre y dijeron en su argumento legal que el tribunal británico no tenía jurisdicción para juzgar los reclamos.
CRF lanzó originalmente el reclamo hace casi tres años después de que La Habana rechazara una oferta de alivio de la deuda hecha por la firma y algunos otros tenedores de bonos.
El presidente David Charters dijo: «Todavía estamos listos para hablar con la otra parte, incluso en esta etapa tardía».
El banco central cubano BNC dijo en un comunicado previo al juicio que el BNC y los funcionarios cubanos “nunca han ignorado sus deudas y siempre han mantenido su interés en negociar con sus legítimos acreedores”.
El desafío legal surge cuando las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos contra Cuba han dejado al país luchando con suministros médicos y alimentarios.
En diciembre, una investigación de la publicación francesa Sorbonne Student Law Review condenó las consecuencias de las sanciones y destacó que han causado pérdidas acumuladas al país de más de $ 933 mil millones (£ 759 mil millones).
La semana pasada, la Dra. Aleida Guevara, activista por los derechos del niño e hija del revolucionario cubano Che Guevara, dijo que las patentes de medicamentos propiedad de los EE. UU. han dejado a las personas necesitadas en posiciones extraordinariamente difíciles a pesar de la atención médica gratuita en la isla.
